2006/07 AC Milan - Manchester United FC 3-0: Crónica

Un AC Milan efectivo, hábil y dinámico no consiguió una gran recompensa en el partido de ida de las semifinales ante el Manchester United FC en Inglaterra y perdió por 3-2, pero pudo disfrutar en el encuentro de vuelta al vencer con claridad por 3-0 y citarse de nuevo en una final con el Liverpool FC.

El Manchester había caído por 2-1 ante la AS Roma en el partido de ida de los cuartos de final, pero goleó al conjunto giallorossi por 7-1 en la vuelta en Old Trafford. En las semifinales, sin embargo, el equipo inglés se vio superado. El Milan de Carlo Ancelotti disputó un increíble partido en San Siro, y su rival fue un mero espectador.

El conjunto rossoneri buscaba remontar la renta del United, y por la forma en la que lo hizo parecía que buscaba igualar la hazaña de su rival e la ronda anterior. Kaká, autor de los dos goles de su equipo en el partido de ida, fue de nuevo la estrella del choque. El jugador brasileño no tardó demasiado en superar a Nemanja Vidić, que volvía a la defensa del Manchester después de más de un mes de baja, y conectar un centro-chut que se marchó fuera por poco.

El centrocampista holandés Clarence Seedorf probó a su compatriota Edwin van der Sar con un disparo desde lejos, y el equipo de Alex Ferguson se vio totalmente superado, hasta que en el minuto 11 el Milan consiguió adelantarse. Seedorf tocó hacia atrás de cabeza un pase desde lejos, permitiendo a Kaká, que llegaba desde atrás, enviar una volea a la esquina inferior izquierda de la portería inglesa.

El centrocampista holandés, después de su asistencia, fue también protagonista en el siguiente gol, que anotó también desde el borde del área cuando había transcurrido media hora de encuentro. Aunque Seedorf fue el que finalizó, un arriesgado pase de Gabriel Heinze y la posterior pérdida de balón deVidić allanaron el camino para el centro de Andrea Pirlo que permitió el 2-0.

El Milan, muy creativo y con la mente bien clara en el centro del campo, nunca vio peligrar su ventaja. La actuación de Massimo Ambrosini resumió a la perfección el astuto planteamiento del Milan, y propició que otro internacional italiano cerrara la cuenta con el tercer gol de los locales a falta de 12 minutos para el final.

Un inteligente pase de Ambrosini desde su propio terreno de juego encontró a Alberto Gilardino, que rompió por el centro la defensa del United. Solo frente al portero, colocó el balón hacia la izquierda del portero, batiéndole cerca del poste. Un elegante gol para culminar la que fue una gran actuación.