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Una eléctrica inauguración

Cinco partidos de la UEFA EURO 2016, incluido un encuentro de cuartos de final, se jugarán en el nuevo Stade of Bordeaux, que este sábado vivió su particular bautizo.

Los jugadores del Burdeos celebrando su primer gol ante el Montpellier
Los jugadores del Burdeos celebrando su primer gol ante el Montpellier ©AFP/Getty Images

Cinco partidos de la UEFA EURO 2016, incluido un encuentro de cuartos de final, se jugarán en el nuevo Stade of Bordeaux, que este sábado vivió su encuentro inaugural con el triunfo del FC Girondins de Bordeaux ante el Montpellier Hérault SC por 2-1. Todo un preámbulo de lo que está por llegar.

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La fiesta fue increíble. Comenzó en las primeras horas de la tarde antes de que un espectáculo de luces y sonido retratase con estilo la historia del club y cerrase una jornada de festejos. Dos de las estrellas de la tarde fueron el jugador Diego Rolán, que marcó el primer tanto en el estadio después de anotar también el último del Stade Chaban-Delmas la pasada semana, y Zinedine Zidane, que recibió una fantástica ovación cuando fue presentado a los espectadores.

Después de la inauguración oficial del lunes, esta fue la primera vez en la que se pudo vivir cómo será el estadio repleto de apasionados aficionados. Las altas gradas demostraron tener una gran acústica. El ruidoso ambiente impresionó tanto a jugadores como aficionados. "Necesitamos tener esta cercanía con los aficionados. Podemos sentir su fortaleza", comentó el atacante del Burdeos Henri Saivet.

Muchos aficionados llegaron pronto al estadio y tuvieron la oportunidad de disfrutar de la fan zone, donde los primeros seguidores disfrutaron del ambiente y la relajación antes del pitido inicial. Después de 26 meses de trabajo y de un coste de 183 millones de euros, finalmente el estadio cobró vida. "Es un sueño", comentó un aficionado que lleva asistiendo a los partidos desde los años 70.

Las 42.115 butacas se llenaron antes del arranque del partido. Una de ellas estuvo ocupada por Irene, de 94 años, la abonada más veterana del club. También asistieron 200 ex jugadores de todas las generaciones, como Fernando, que estuvo entre 2006 y 2011 y que viajó especialmente desde su nativa Brasil para la ocasión.

Pero la última palabra la tuvo Marc Planus, que jugó su último partido con el club. "El Burdeos merece un estadio tan bonito. Fue una maravillosa inauguración", comentó el futbolista tras su encuentro 300 en la Ligue 1 con el equipo.

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