Suiza deja atrás sus fantasmas
martes, 12 de octubre de 2010
Resumen del artículo
Suiza - Gales 4-1
El equipo de Hitzfeld logró sus primeros puntos en el Grupo G con dos goles en cada parte, entre ellos un doblete de Stocker.
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Finalmente Suiza logró estrenar su casillero de puntos en la clasificación para la UEFA EURO 2012 con una convincente victoria ante Gales, cuya tercera derrota consecutiva en el Grupo G les deja último de su sección con un sólo punto.
Un tanto de Marco Streller en el minuto 21 mandó a los locales con ventaja al descanso después de que Gareth Bale empatara el partido tras el tanto inicial de Valentin Stocker. Gökhan Inler marcó de penalti en el 82 y Stocker hizo doblete para los de Ottmar Hitzfeld, que ahora comienzan su persecución a Inglaterra y Montenegro mientras que Gales luchará por no quedarse sin ninguna opción cuando vuelva la fase de clasificación en marzo.
Ocho minutos habían transcurrido cuando los hombres de Hitzfeld celebraron su primer gol de la noche. Stocker fue su autor tras aprovechar un toque de cabeza fortuito de Streller tras un disparo de Tranquillo Barnetta. Pero Gales logró empatar por medio de Bale tras un buen centro de Andrew Crofts que superó a Marco Wölfi, que había sustituido al lesionado Diego Benaglio.
Con Gales eufórica por el gol, Wölfi tuvo que realizar una impresionante parada frente a James Collins y eso fue crucial para que llegará el segundo tanto suizo. Inler picó un balón para Streller y éste con una suave volea lo colocó en toda la escuadra. El delantero del FC Basel 1893 pudo hacer su segundo tanto antes del descanso, pero Ashley Williams no lo permitió.
Gales tuvo la primera oportunidad de la segunda mitad cuando un envío de Darcy Blake fue rematado de cabeza alto por Andy King. Pero Blake casi provoca un gol en contra para su selección al fallar en el despeje de un centro de Alex Frei. Stocker llegó a rematar pero su potente testarazo fue despejado por Wayne Hennessey.
La determinación visitante no estuvo nunca en duda en un encuentro muy abierto. Bale percutió de forma insistente por su banda y casi fuerza el empate tras una gran galopada en la última fase del partido. Sin embargo, un penalti transformado por Inler tras una falta de Christian Ribeiro sobre Barnetta y el cuarto gol anotado por Stocker aseguraron que el último partido de Brian Flynn como seleccionador interino de Gales acabara en otra decepción.