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La UEFA, antesala de la Champions

Ganar esta competición puede ser un buen trampolín para triunfar luego en la Champions, como lo demostraron el Oporto y otros clubes europeos.

La Copa de la UEFA ha demostrado ser un un buen campo de entrenamiento para futuros vencedores de la UEFA Champions League durante toda su historia.

Más confianza
Alzar la Copa de la UEFA no garantiza posteriores triunfos. Sin embargo, la historia ha demostrado en varias ocasiones que puede dar más confianza y propiciar la consecución de nuevos trofeos. El FC Porto es el ejemplo más reciente.

El doblete del Oporto
El equipo luso ganó la Copa de la UEFA en 2003, tras vencer en la final al Celtic FC. Bajo las órdenes de José Mourinho, los portugueses alzaron la UEFA Champions League la siguiente temporada. Las lecciones aprendidas durante su victoriosa campaña en la Copa de la UEFA le permitieron ganar posteriormente la máxima competición de clubes europea, gracias a un triunfo por 3-0 en la final frente al AS Monaco.

El ejemplo Benítez
Esa misma campaña, algo similar ocurrió con el Valencia CF de Rafael Benítez, que ganó la Copa de la UEFA. Tras vencer al Olympique de Marseille en la final, el conjunto ché fue el siguiente vencedor de una competición que había ganado el Oporto la temporada anterior. Benítez no sabía entonces que iba emular a Mourinho yéndose al Liverpool FC.

Como Mourinho
El técnico madrileño, al igual que el entrenador portugués, emigró al fútbol inglés, donde consiguió la Copa de Europa, 12 meses después de su triunfo con el Valencia en la seguda máxima competición europea.

Explicación
Sería imposible medir la confianza que puede aportar un primer título europeo pero es indudable que contribuye a reforzar la fuerza mental de un equipo o, en el caso de Benítez, de un entrenador. El dicho según el cual 'el éxito trae el éxito' se cumple en algunas ocasiones.

El ejemplo de los reds
El Liverpool ganó la Copa de la UEFA en dos ocasiones durante la década de los 70, aunque no alzó su primera Copa de Europa hasta 1977. Su victoria en la Copa de la UEFA la temporada anterior le dio sin duda una experiencia incomparable para abordar la máxima competición europea y permitió a sus futbolistas pasar de ser buenos jugadores a grandes estrellas.

El Ajax, un modelo atípico
Sin embargo, un triunfo en la Copa de la UEFA no es imprescindible para levantar la Copa de Europa. El AFC Ajax no necesitó ganar otra competición europea antes de ganar consecutivamente tres Copas de Europa a principios de la década de los 70. No obstante, el conjunto holandés tardó 22 años en volver a ganar la competición. (1995)

Más que un trofeo
Se puede decir lo mismo del Liverpool, que tuvo que esperar 21 años para lograr su quinto cetro europeo y, una vez más, llegó unos pocos años después de que consiguiera la Copa de la UEFA. Parece ser que el futuro vencedor de esta competición tendrá más de un motivo para celebrar la victoria el próximo mes de mayo en Eindhoven.