Reyes de Europa

Hubo que esperar a los penaltis, tras 120 minutos agónicos y como en Hampden Park ante el RCD Espanyol en 2007, para que el Sevilla FC volviera a aliarse con el éxito y alzar la UEFA Europa League 2013/14, su tercera, con Beto y Kevin Gameiro como protagonistas, que cerraron la final ante el SL Benfica en el Juventus Stadium de Turín. Choque de iguales, pugna entre dos estrategas como Unai Emery y Jorge Jesus, pero el de Hondarribia tuvo el jaque mate en los guantes de Beto para que el Sevilla ingrese en un club selecto, en el grupo de tricampeones de la competición (Copa de la UEFA y UEFA Europa League) junto a FC Internazionale, Juventus y Liverpool FC. Noche para el recuerdo en el Juventus Stadium, que pasa desde ya en el álbum de destinos favoritos de los blanquirrojos junto al PSV Stadion de Eindhoven y al estadio de Glasgow.

El Benfica pareció salir con más poso, quizás por la experiencia del año pasado, y los 'encarnados' trataron de aprovechar esos metros con internadas por la zona izquierda. El lateral Guilherme Siqueira se convirtió en un extremo más y sus saques de banda llevaron los primeros sustos al marco de Beto. Nueve minutos necesitó Ivan Rakitić para hilvanar la primera acción andaluza. Conducción de un veloz croata, bola a la izquierda para José Antonio Reyes y el centro del utrerano encontró a Carlos Bacca, pero el colombiano estaba en posición antirreglamentaria.

El serbio Miralem Sulejmani pidió protagonismo en el costado diestro y dos intervenciones del balcánico acabaron con las amonestaciones de Federico Fazio y Alberto Moreno. No le duró mucho la gasolina a Sulejmani, que se fue lesionado tras caer mal. Una falta botada de forma muy cerrada por Lima pudo acabar en el 0-1 en el 14', pero Nicolás Pareja sacó in extremis.

El Sevilla ganó metros y templó el encuentro. Pasada la media hora, un contragolpe lanzado por Coke encontró a Reyes y éste a un Alberto Moreno que se desmarcó en diagonal, pero que tras hacerse hueco topó con un seguro Jan Oblak. Carlos Bacca, muy bien vigilado por Ezequiel Garay y Luisão intentó disparar dentro del área desde el suelo, pero el brasileño tiró de experiencia y evitó la acción.

El descuento del primer acto pudo tener un desenlace dramático para los de Emery. Maxi Pereira, que adelantó su posición tras la baja de Sulejmani, disparó en a escasos metros de Beto, pero el luso mostró reflejos. Rodrigo tuvo una segunda oportunidad, pero otra vez surgió Beto.

El Benfica volvió a enchufarse con el pitido inicial del segundo tiempo y una pérdida de Alberto Moreno se tradujo en un disparo cruzado de Lima que superó a Beto, pero surgió, otra vez, la pierna de Pareja. Rodrigo y el propio Lima forzaron al meta del Sevilla en la continuación, pero no hubo forma de encontrar la red.

Rakitić y Reyes se asociaron a la perfección por el carril central, pero el extremo se cruzó con un imperial Luisão. El andaluz no perdió protagonismo y probó desde lejos a Oblak y después recortó en el área para intentar encontrar a Bacca, pero el colombiano se quedó con el molde cuando ya imaginaba el primero de la noche en el Juventus Stadium a los 55 de juego.

Ambos equipos se quitaron el corsé habitual de una gran cita y la medular comenzó a perder protagonismo para pasar a ataques alternos en ambos marcos. Jorge Jesus y Unai Emery no quisieron dar el paso, ambos tenían a jugadores calentando en la banda, pero no querían mover a un peón. En el minuto 78 la partida vivió un nuevo giroy el alemán Marko Marin ingresó en el verde turinés por Reyes. Oxígeno en los tres cuartos para tratar de unirse a un incisivo Vitolo y encontrar a Bacca con verticalidad en los costados.

Lima levantó a la grada portuguesa en el minuto 84 con un disparo lejano con la diestra que cogió trayectoria de gol, pero Beto tuvo de nuevo reflejos y sacó a córner. E instantes después un centro envenenado de Rodrigo conectó con la cabeza de Garay, pero el argentino mandó el esférico por encima del travesaño. Otra vez Garay, esta vez en el tiempo añadido, tuvo la oportunidad dentro del área. La prórroga era irremediable. El tiempo extra tuvo un libre directo de Lima, que desbarató Beto de puños, y una acción clarísima de Bacca, que tras cabalgada cruzo demasiado sin darle la rosca deseada. Emery y el fondo blanquirrojo cantaron el gol.

Kevin Gameiro, el máximo artillero sevillista en la competición, entró por el suplente Marin, y el galo tuvo otra noche para el recuerdo en el torneo continental. Avisó en el minuto 110, pero su disparo se fue al lateral de la red de Oblak. Los onces metros, el momento de tensión y otra vez Beto se erigió en héroe, como en el 'Euroderbi' de octavos de final frente al Real Betis Balompié. Paró a Óscar Cardozo el segundo, a Rodrigo el tercero y Gameiro se encargó de llevar el delirio al sevillismo haciendo el 4-2 definitivo. El Sevilla FC está entre los más grandes de la competición.