Jorge Vilda quiere revalidar el título

En un mes, España tiene la esperanza de levantar por segunda vez consecutiva en Nyon el Campeonato de Europa Femenino Sub-17, pero antes deberá deshacerse de Islandia en las semifinales. El entrenador Jorge Vilda, cuyo padre Ángel lideró a España en su acceso a la final de 2009 antes de cambiar de cargo y entrenar a la sub-19, habló con UEFA.com sobre sus ambiciones y los rivales.

UEFA.com: Hay muchas expectativas en su equipo después del triunfo el pasado año.

Jorge Vilda: Mi equipo ha logrado el objetivo principal de este año, que era clasificarse para la fase final por tercera ocasión consecutiva. Lo que viene ahora es un premio extra. Nosotros buscábamos llegar a las semifinales y ahí estamos. Vamos a ver si somos capaces de dar un paso más y acceder a la final.

UEFA.com: ¿Qué conclusiones extrae de la segunda ronda de clasificación?

Vilda: Los rivales eran muy fuertes y cada año es más duro clasificarse a la fase final. Hay equipos como la República Checa que tiene jugadores muy jóvenes que lo dan todo y serán muy peligrosas en los próximos años.

UEFA.com: ¿Y cuáles son sus conclusiones sobre España?

Vilda: Hemos demostrado que nuestro estilo de pase e intercambios rápidos han sido la clave para llegar lejos en estos torneos.

UEFA.com: ¿Qué sabe de Islandia, su rival en semifinales?

Vilda: Son un combinado rápido y que completó la segunda ronda de clasificación ganando todos sus partidos y mostrando una gran capacidad anotadora.

UEFA.com: ¿Cuál es su equipo favorito para llevarse el título?

Vilda: La favorita siempre es Alemania. Después venimos España, Francia e Islandia que trataremos de llegar hasta la final. Nosotros tres estamos muy igualados y puede pasar cualquier cosa cuando nos enfrentamos entre nosotros.

UEFA.com: ¿Piensa que este tipo de torneos son importantes para la formación de los jugadores?

Vilda: El torneo es muy importante porque enseñan a las chicas jóvenes a competir. Una vez que lo logran, hay que ir a por la victoria y tratar de ganar porque lo considero más importante que una derrota.