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Austria mantiene el amor por un juego hermoso

El fútbol austríaco tiene una rica y memorable historia. Este deporte recibió su empuje inicial en 1890 por los jardineros ingleses que trabajaron para la familia de banqueros Rothschild en Viena.

Los jugadores de Austria son fotografiados tras asegurar la tercera plaza en el Mundial de 1954
Los jugadores de Austria son fotografiados tras asegurar la tercera plaza en el Mundial de 1954 ©Popperfoto/Getty Images

El fútbol austríaco tiene una rica y memorable historia. Este deporte recibió su empuje inicial en 1890 por los jardineros ingleses que trabajaron para la familia de banqueros Rothschild en Viena. Aquellos jardineros plantaron la semilla de aquel deporte mientras pateaban la pelota en sus tiempos libres, el fútbol pronto ganó popularidad entre los vieneses. En 1984 se formaron los primeros clubes de la capital, el First Vienna Football Club y los Cricketers.

En 1904 se fundó la Federación Austríaca de Fútbol (ÖFB) y pasó a ser miembro de la FIFA, organismo rector del fútbol mundial, en 1905. La introducción de la jornada laboral de ocho horas diarias en 1919 llevó a que el fútbol se convirtiese en el deporte más popular del país.

El profesionalismo llegó a los dos primeras divisiones en 1924. En los años siguientes, el fútbol en Austria se colocó en escena mundial. En el período entre 1930 y 1933, el legendario Wunderteam, con el delantero centro Matthias Sindelar y el entrenador Hugo Meisl en sus filas, se mantuvo invicto en 16 partidos consecutivos. El fútbol austríaco disfrutó de otra etapa dorada entre 1950 y 1954, en la que estrellas internacionales como Ernst Ocwirk, Gerhard Hanappi y Ernst Happel se hicieron un nombre en el panorama futbolístico.

Austria se ha clasificado para la fase final de una Copa del Mundo FIFA en siete ocasiones, y sus mejores actuaciones llegaron en 1954 en Suiza donde fue tercera y en 1934 en Italia donde fue cuarta. El equipo nacional de aficionados ganó la medalla de plata en las Olimpiadas de Berlín y fue campeón de Europa en el campeonato celebrado en España en 1967.

Los austríacos también dejaron huella pronto en la escena internacional a nivel de clubes. El primer traspaso internacional se realizó en 1905, cuando el portero Karl Pekarna se fue de Viena para fichar por el Rangers FC escocés. Las estadísticas muestran que en 1938, un total de 62 profesionales austríacos estaban jugando sólo en Francia. Algunos de ellos, como Heini Hitl, Gustl Jordan y Rudi Hiden, obtuvieron la nacionalidad francesa y comenzaron a jugar con la selección de Francia. Ernst Happel también jugó en Francia, y formó parte del combinado de la FIFA que empató contra Inglaterra en 1953.

Happel disfrutó de una gran carrera como entrenador, en la que ganó diecisiete títulos nacionales e internacionales, incluyendo la antigua Copa de Europa y la Copa Intercontinental con el Feyenoord (1970) y la Copa de Europa con el Hamburguer SV (1983). A nivel de selecciones, Happel clasificó a Holanda para la Copa del Mundo FIFA que se disputó en Argentina en 1978. El estadio nacional del país, en Viena, escenario de la final de la UEFA EURO 2008, lleva su nombre en su honor.

Hans Krankl fue el héroe del fútbol austríaco en la década de los 70. Delantero letal, Krankl se ganó su reputación fuera de su tierra natal, ayudando al FC Barcelona a hacerse con la Recopa de Europa de la UEFA de la campaña 1978/79. El año anterior, Krankl se hizo con la Bota de Oro, premio al máximo goleador europeo, con una marca de 41 goles para el SK Rapid Wien. Su compañero de selección, el centrocampista Herbert Prohaska fue elegido Mejor Futbolista del Siglo de su país.

En los noventa, Toni Polster y Andreas Herzog fueron la exportaciones austríacas más famosas, y ambos destacaron en la Bundesliga alemana. Polster emuló a Krankl y se hizo con la Bota de Oro. Sus 44 goles para Austria son todavía un récord nacional. Herzog es el futbolista con más internacionalidades, con 103 encuentros disputados.

Austria también ha disfrutado del éxito en el fútbol juvenil. Su selección sub-17 participó por primera vez en la Copa del Mundo FIFA de la categoría en Egipto en 1997, y ese mismo año, el combinado sub-16 fue subcampeón de Europa. En 1977 se pusieron en marcha Centros Federales de Preparación para jóvenes en todo el país, y se creo un campeonato nacional júnior que se ha venido celebrando cada año desde el 1989 bajo el nombre de Liga Juvenil Toto. El cuarto puesto de Austria en la Copa Mundial de la FIFA Sub-20 disputada en 2007 en Canadá indicaba que estaban en el buen camino.

Junto a su vecina Suiza, Austria acogió de modo exitoso la fase final de la UEFA EURO 2008™, un importante hito en la historia de la ÖFB. Fue la primera aparición de la selección absoluta en un Campeonato Europeo de la UEFA.

Ocho años despuñes, las inversiones en el fútbol juvenil finalmente valieron la pena. Liderada por la nueva estrella David Alaba, Austria logró una plaza en la EURO 2016 con una fase de clasificación impresionante en la que cosecharon nueve victorias y un empate. Sin embargo, el equipo de Marcel Koller no pudo repetir esa gran actuación en la fase final de Francia.