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Triunfo y liderato hacia los octavos

FC Dynamo Kyiv - FC Barcelona 1-2
El Barcelona remontó el gol inicial del Dínamo y se llevó los tres puntos gracias a los tantos de Xavi y Messi.

El Barcelona logró en Kiev el primer puesto del Grupo F
El Barcelona logró en Kiev el primer puesto del Grupo F ©Getty Images

El FC Barcelona logró el pase a los octavos de final y el primer puesto del Grupo F gracias a su victoria por 1-2 ante el FC Dynamo Kyiv. Artem Milevskiy puso al Dínamo por delante nada más empezar el encuentro con un lanzamiento de falta que se escapó de las manos de Víctor Valdés, pero el Barça no se descompuso y sometió al rival con su juego hasta que Xavi Hernández firmó el empate antes del descanso. Tras una plácida segunda parte, Lionel Messi anotó el tanto de la victoria con un lanzamiento de falta. Con este resultado y la victoria del FC Internazionale Milano ante el FC Rubin Kazan, el Barça logra su pase a los octavos como campeón del Grupo F, mientras el conjunto italiano lo hace como segundo clasificado. El Dínamo, por su parte, queda colista y sin competición europea.

Sin especular
A pesar de que sólo una carambola de resultados dejaba fuera al conjunto azulgrana, Josep Guardiola no especuló y sacó toda su artillería en busca del ansiado primer puesto del ajustado Grupo F. En la máquina culé no faltó nadie a esta trascendental cita y los Lionel Messi, Zlatan Ibrahimović, Andrés Iniesta o Xavi Hernández arrancaron el encuentro de inicio. Enfrente se plantó un Dínamo colista pero con esperanzas de clasificación, volcado en la genialidad de Milevskiy y en los destellos de Andriy Shevchenko.

Error de Valdés y gol
No pudo comenzar peor el encuentro para el Barcelona, que apenas había tocado el esférico cuando recibió el primer tanto. Una falta botada por Milevskiy sin mucho peligro resbaló en las manos de Valdés y el balón rodó hasta sobrepasar la línea de gol. El Dínamo se colocaba a un tanto de la proeza y comenzaba a mirar de reojo a Milán, más todavía cuando el Inter se adelantaba en el marcador ante el Rubin. El Barça, por su parte, comenzó a deshacer la intensa presión local a base de movilidad y toque, pero su primera ocasión llegó con un error del guardameta Olexandr Shovkovskiy, que sacó mal un saque de puerta para que Messi se plantase delante de la portería. El argentino disparó raso, pero el ucraniano enmendó su error con una gran estirada.

Justo empate
A partir de entonces el Barça se apropió del balón hasta acumular un 77 por ciento de posesión. Lo intentaron Daniel Alves e Ibrahimović con disparos lejanos mediada la primera parte, incluso durante ciertos compases el Barça probó con el juego aéreo hacia el delantero sueco, pero el conjunto azulgrana sólo conoce un camino hacia el gol: el toque. Los de Guardiola comenzaron a amasar el esférico con mucha paciencia hasta encontrar un resquicio en la zaga ucraniana que llegó en el 33’, cuando tras una larga y trabajada jugada colectiva Eric Abidal colocó un perfecto centro raso ante la llegada de Xavi Hernández, que no erró y firmó el empate. Con el tanto y sin el balón, las esperanzas del Dínamo se esfumaron de la misma forma que desaparecieron las prisas en los hombres de Guardiola.

Con intensidad
El segundo tiempo empezó con la misma tónica. El Dínamo necesitaba cuatro goles más pero el empate lo colocaba en la tercera plaza que da acceso a la UEFA Europa League, así que no bajó ni el ritmo ni la presión. Empujó al Barça en estos primeros compases y rozó el tanto con un cabezazo de Leandro Almeida en el 53’, aunque los azulgranas tardaron poco en engrasar su juego, un tanto lento en el arranque. Controló más el juego pero abusó del pase horizontal y tampoco creó excesivo peligro. El Dínamo, por su parte, sobrevivió a base de impulsos y de jugadas a balón parado, sin prisas por buscar la victoria gracias a las noticias que llegaban desde Milán.

Siempre Messi
Con Ibrahimović más desaparecido en Kiev, Messi tiró de galones. Con el marcador a favor se movió por todo el campo para dormir el balón y esconderlo. Incluso tuvo el tanto de la victoria en una gran jugada individual. Trazó una de sus clásicas diagonales y se libró de cuantos rivales salieron a su paso, pero su disparo rechazó en un rival. Sin embargo, el argentino se desquitó a escasos minutos para el final, cuando en un lanzamiento de falta colocó el balón con suavidad al fondo de la red y dejó al Dínamo sin Europa League. El objetivo culé se cumplió con el pitido final. Los octavos llegaron en la última jornada, el vigente campeón pagó sus errores ante el Rubin en la fase de grupos, pero se planta en los octavos dispuesto a vender cara su corona.