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Di María ilumina al Madrid

AJ Auxerre - Real Madrid CF 0-1
Un gol del argentino en la recta final permitió la victoria blanca y evitó otro partido sin ver puerta de los de Mourinho.

Di María ilumina al Madrid
Di María ilumina al Madrid ©Getty Images

Segunda victoria del Real Madrid CF en la presente UEFA Champions League, esta vez ante el AJ Auxerre por 0-1 gracias a un gol salvador en el último tramo del encuentro de Ángel Di María.

Comenzó sin intención de especular el Madrid. Agresivo y muy perpendicular, el conjunto de José Mourinho salió al campo consciente de que su visita al Stade Abbé-Deschamps es probablemente la menos complicada que tendrá en el Grupo G. Pero el primer susto fue para Iker Casillas, que a punto estuvo de encajar el primer gol del partido tras una mala salida en los instantes iniciales del encuentro.

Con el paso de los minutos el partido bajó un poco de revoluciones, y fue cuando el Madrid empezó a jugar a ras de suelo cuando llegaron las primeras ocasiones blancas. La primera fue un disparo desde la frontal de Cristiano Ronaldo que rechazó bien Olivier Sorin y la segunda otro potente disparo de Lassana Diarra que se marchó rozando el poste izquierdo del Auxerre.

Precisamente fue el centrocampista francés el jugador más enchufado en los primeros minutos de encuentro. Integrado en un centro del campo con Xabi Alonso y Sami Khedira, Lass y el alemán aprovechaban todos los ataques del Madrid para descolgarse hacia el ataque dejando a Alonso la responsabilidad de distribuir el juego por detrás.

Por su parte, el Auxerre no volvió a inquietar el marco de Casillas hasta el minuto 25. Tras un saque de falta de Benoît Pedretti, el africano Delvin Ndinga conectó un buen cabezazo que se marchó pegado al poste derecho de la portería del conjunto español. Pese a ello, los ataques del conjunto de Jean Fernandez eran muy escasos y la posesión era acaparada cada vez más por un Madrid que en Champions es capaz de controlar mucho más los partidos que en sus partidos de la Liga.

En el minuto 35 volvió a aparecer Lass con otra de sus internadas entre los centrales del Auxerre, pero su remate se fue alto. Y dos minutos más tarde Alonso puso un pase perfecto en profundidad para Marcelo, cuyo remate salvó de forma casi milagrosa un acertado Sorin. Ocasiones claras para un Madrid que poco a poco se iba volcando más y más sobre el área local.

En el segundo periodo el guión del partido no varió en exceso. El Madrid seguía con la pelota pero con la pólvora mojada. Sus ataques eran demasiado estáticos, sin desmarques de ruptura, y por ello Mourinho decidió dar entrada a Mesut Özil en lugar de Karim Benzema, para buscar más el juego entre líneas. Pero el juego blanco continuó igual de espeso. Lo intentaban Ronaldo, Lass, Khedira o Álvaro Arbeloa una y otra vez, pero la defensa del Auxerre no dejaba huecos.

El cuadro francés buscó dar la sorpresa en alguna contra aislada. Ireneusz Jeleń, que salió en el descanso para aportar más pegada a los galos, tuvo una buena ocasión en el minuto 62 pero su remate no vio puerta. No fue más que un espejismo. El Madrid seguía llevando el peso del partido y protagonizando las ocasiones. Ronaldo lanzó una falta lejana con potencia y obligó a Sorin a intervenir de nuevo, y en el saque de esquina posterior el portugués estuvo a punto de abrir el marcador en el minuto 70 con un remate de cabeza desde el centro del área.

La desgracia estuvo a punto de cebarse con el nueve veces campeón de Europa en el minuto 79 cuando un centro desde la izquierda de los franceses fue despejado por Pepe contra el poste de su propia portería. El susto no intimidó a Ángel Di María, que desde su entrada en el campo por Lass no dejó de percutir contra la defensa gala. Y el argentino obtuvo el tan ansiado premio en el minuto 81.

Tras un gran pase diagonal de Özil, Di María controló en el interior del área y tras dejar el balón caer lo empalmó para estrellarlo contra las redes defendidas por Sorin y asegurar los tres puntos para su equipo. Fundamental la entrada del ex jugador del SL Benfica para dar vida a un Madrid que casi había dejado de confiar en la victoria tras chocar una y otra vez contra la muralla defensiva creada por Fernandez.