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El Barça se sobrepone

FC Barcelona - Chelsea FC 2–1
El equipo culé remonta un partido que muchos ya daban por perdido.

Por Albert Bassas

FC Barcelona y Chelsea FC midieron su potencial con un partido vibrante ante un Camp Nou abarrotado con ilusión y ganas de ver gran fútbol. Un gol en propia meta de Juliano Belletti puso la eliminatoria muy cuesta arriba para los azulgranas, pero un tramo final de partido excelente le permitieron dar la vuelta al marcador. Maxi López primero, y Samuel Eto’o poco más tarde pusieron un resultado final que deja los cuartos de final al aire para la vuelta en Inglaterra.

Barça concentrado
Los hombres de Frank Rijkaard empezaron el encuentro con las ideas muy claras y prácticamente sin dar opción al rival. Eso les permitió disfrutar de un par de aproximaciones con peligro en los primeros compases del partido, la primera de Ronaldinho que chutó demasiado cruzado, y la segunda de Samuel Eto’o justo en la jugada siguiente. Los londinenses, por su parte, se mostraron incapaces de jugar con el balón controlado y sin demasiada precisión en sus combinaciones. De hecho, el Chelsea no pasó de medio campo en los primeros quince minutos.

Buscando las bandas y presionando
Después de un fuerte inicio, el juego del Barça se ralentizó. Pero sólo en ataque porque en defensa siguió presionando muy arriba, lo que les dio muy buenos resultados nada más comenzar. Los azulgranas hicieron evidente quee tenían la lección muy bien aprendida sobre la peligrosidad del Chelsea en el contraataque. Delante y con los blues muy cerrados, el Barça solo pudo optar por abrir el campo al máximo, jugando por las bandas. Ronaldinho, des de la izquierda y Ludovic Giuly pegado a la derecha dieron los únicos centros de la primera parte que no se concretaron con claras ocasiones.

El Chelsea se acomoda y gol
Pero a medida que iban pasando los minutos, los visitantes se veían más cómodos en el terreno de juego. Los culés controlaban el balón y tocaban con tranquilidad. Pero lo cierto es que al Chelsea ya le va este juego. Incluso a veces lo hace mejor sin tener la posesión de la pelota. Fruto de ello, vino la primera ocasión y, como no, saliendo al contragolpe, con transacciones rápidas y largas. De esta manera, el motor Frank Lampard abrió des de detrás para Damien Duff que corría por la derecha y éste centró des de la banda para Didier Drogba o Tiago que ya la esperaban. El brasileño Juliano Belletti interceptó el pase introduciendo el esférico a su propia meta ante la desesperación del portero Víctor Valdés. Como un jarro de agua fría, los ingleses sorprendieron a los azulgranas con lo que más temían.

Los ingleses perdonan
El gol, que llegó a poco más de diez minutos para el final, descolocó por completo a los barcelonistas que hasta pudieron haber encajado un segundo tanto que hubiera sido letal. De nuevo por la banda, Drogba recogió un buen balón que supo encarar con rapidez y habilidad hacía la portería de Valdés, pero su remate –el segundo de los de José Mourinho- salió demasiado cruzado. El Barça acabó la primera mitad, prácticamente, pidiendo la hora a pesar de haber disparado hasta en doce ocasiones sobre el meta Petr Cech.

Expulsión de Drogba
El comienzo de la segunda parte vino marcado por la segunda tarjeta amarilla a Drogba. El delantero de Costa de Marfil tuvo un encontronazo con Valdés después de no haber llegado a un balón y provocó su expulsión un tanto rigurosa e infantil.
La jugada fue la excusa perfecta para que el Chelsea se replegara todavía más. Ante este panorama el técnico holandés volvió a actuar con rapidez y valentía haciendo dos cambios consecutivos. Andrés Iniesta entró en el lugar de Demetrio Albertini para controlar todavía más el partido y Maxi López hizo lo suyo con el francés Giuly.

Maxi da alas al Barça
Y la apuesta de Rijkaard no pudo ser más acertada. El argentino, que debutaba en Liga de Campeones con su nuevo equipo, hizo lo que todo el Barça no pudo hacer hasta el momento. Rompió la defensa inglesa en el primer balón que tocaba gracias a un perfecto trallazo cruzado después de fintar con la cintura a su defensa. Sin duda, con el gol y ante un Chelsea en inferioridad numérica, los azulgranas se volvieron a hacer con el partido.

Otro gol
Tanto fue así que en un abrir y cerrar de ojos el Barça le dio la vuelta al marcador. Otra vez Maxi López, totalmente crecido, hizo des de la banda un centro-chut que acabó rematando Eto’o entrando con velocidad desde detrás. Los de Rijkaard siguieron volcados al ataque y en el último cuarto de hora acecharon la portería de Cech. Los culés terminaron poniendo a prueba al meta del Chelsea tanto con disparos largos como des de corta distancia y hicieron que el resultado final incluso supiera a poco. Finalmente, la mejor delantera pudo imponerse a la mejor defensa pero todo queda pendiente de lo que suceda en Stanford Bridge.