Austria quiere reescribir la historia

Trece años después del día más famoso del fútbol austriaco, Josef Hickersberger tiene una nueva cita con la historia cuando su equipo se enfrente a Alemania en Viena en busca de una plaza en los cuartos de final de la UEFA EURO 2008™, aunque el entrenador prefiere mirar a otro lado para buscar inspiración.

Recuerdos de Viena
Una victoria por 3-2 en Córdoba en la Copa Mundial de la FIFA de 1978 dejó fuera a la entonces campeona Alemania Federal, la única victoria en diez enfrentamientos ante esa selección y la Alemania unificada de años después. Mucho ha cambiado desde aquel encuentro, en el cual Hickersberger jugó, hasta este enfrentamiento del lunes que decidirá la segunda plaza del Grupo B: "Se han dicho muchas cosas de lo de Córdoba. Para mí, la historia se repite. En 1989, jugué ante Alemania Democrática en Viena en un decisivo encuentro de clasificación para la Copa Mundial de 1990 y ganamos 3-0. Mañana los nombres serán diferentes, pero estaremos deseando repetir esa victoria".

'Alles oder nichts'
La portada del suplemento del diario Kurier titulaba simplemente "Alles oder nichts", y para Austria, la ecuación es igual de sencilla: ganar o unirse a la otra co-anfitriona, Suiza, y quedar eliminada de su propio torneo en la primera ronda. Tras perder por 0-3 ante Alemania en febrero, y sin una victoria ante sus rivales desde 1986, parece muy difícil lograrlo, pero Hickersberger está confiado: "Estamos en una gran forma. Somos mejores de lo que lo éramos en febrero y tenemos oportunidad de lograrlo. Este es el partido más importante de mi vida, y si ganamos será el más importante de la historia".

Punto crucial
Un penalti transformado por Ivica Vastic en el tiempo añadido dio a Austria un empate ante Polonia el jueves, cuando Alemania perdió ante Croacia por 2-1, y el seleccionador austriaco, que sólo cuenta con la baja del suspendido Sebastian Prödl, ha visto lo suficiente en los dos primeros partidos para tener razones para creer en su equipo. "Alemania no estuvo bien ante Croacia, y tienen algunos problemas. Uno o dos jugadores están lesionados, no están jugando del todo bien, y nosotros tenemos la ventaja de jugar en casa. Yo pondría nuestras posibilidades al 40 por ciento. La gente pensará que soy pesimista, pero eso está bastante bien. Lo importante es que tenemos una oportunidad y si me hubieran dicho esto hace un año, me hubiera conformado con ello", dijo.

"Jugar al límite"
El seleccionador alemán Joachim Löw ha animado a sus jugadores a "evitar señalarse unos a otros como culpables", tras la derrota ante Croacia, y ya anticipa una reacción positiva en este partido. "Prometo que el equipo jugará diferente. Trece millones de personas estarán viéndonos desde Alemania y tenemos que ganar por ellos y por nuestra nación. El partido ante Croacia es cosa del pasado. Tendremos que jugar al límite porque Austria ha mejorado en las últimas semanas. Son un equipo de luchadores pero iremos con motivación extra", comentó Löw.

Trío disponible
Marcell Jansen se perderá el partido por un problema en el hombro, mientras que Bastian Schweinsteiger está sancionado tras su tarjeta roja ante Croacia, pero el máximo goleador del equipo Lukas Podolski, Philipp Lahm y Heiko Westermann, los tres con problemas, en principio podrán jugar. Löw cree que el equipo tendrá que enfrentarse a las expectativas creadas: "Un poco de presión no viene mal. Mi equipo se las apañará bien con ello. Si jugamos bien, no hay que tener miedo de nuestros rivales. Intentaremos hacer nuestro partido, imponiendo nuestro estilo y demostrando lo que podemos hacer".