El Celtic toma ventaja

El Celtic FC aumentó su magnífica marca con 74 partidos oficiales sin conocer la derrota en su estadio, ya que esta noche vencieron por 1-0 a un mermado FC Barcelona que jugó toda la segunda mitad con nueve jugadores.

Intensa lucha
La afición del Celtic, la mejor del mundo según la FIFA, hizo honor a su galardón y fue respetuosísima durante el minuto de silencio que se guardó en señal de duelo por los trágicos atentados de esta mañana en Madrid. Desde el pitido inicial del encuentro, y arengados por su público, el Celtic intentó hacerse con el dominio del centro del campo con una fuerte presión. Así, la primera ocasión llegó tras una jugada en la frontal del área en la que Stephen Pearson recibió un balón y chutó un potente disparo que se fue fuera, a la derecha de Víctor Valdés, por muy poco. El Barça procuraba salir de esa presión y la intensidad de la misma hacía que los blaugrana no fueran demasiado precisos en sus pases.

El Barça pone la calidad
Sin embargo, conforme iba avanzando la primera mitad, el Barcelona lograba triangular con más efectividad. Las ocasiones de los visitantes eran cada vez más claras. Primero Phillip Cocu controló un pase fuera del área tras una gran combinación con Luis García. El holandés recibió de espaldas, se revolvió y chutó fuera por poco. Pero la ocasión posterior de Javier Saviola fue aún más franca. Ronaldinho y Thiago Motta trenzaron una jugada en las inmediaciones del área escocesa y éste último le metió un balón al argentino, que solo ante Robert Douglas picó el esférico bien, pero desviado.

Toma y daca
El Celtic, lejos de amedrentarse, seguía trabajando duro en el medio del campo y así lograba llegar a la portería culé, aunque luego no terminaba de crear ocasiones claras de gol. El Barcelona, por su parte, volvía a tener otra buena oportunidad de abrir el marcador cuando Ronaldinho se quedó solo ante Douglas tras un gran pase de Saviola. El brasileño intentó centrar un poco escorado desde la derecha a Luis García, que entraba en el segundo palo, pero el balón fue demasiado fuerte. De nuevo, el astro carioca corrió a por un pase largo en la banda izquierda, y tras dejar sentado magistralmente a Bobo Balde, mandó un pase a Saviola que éste no llegó a rematar al cortar bien la defensa del Celtic. Alan Thompson tuvo la ocasión más clara de los escoceses cuando dentro del área controló un balón y envió un ajustado tiro que despejó bien Valdés.   

Expulsiones en la reanudación
La sorpresa se daba en la vuelta de los jugadores al campo para disputar la segunda parte. En el Barcelona faltaba Motta y en el Celtic Douglas. Ambos fueron expulsados por un incidente en el túnel de vestuarios. El guardameta local era sustituido por David Marshall. El sacrificado fue el delantero Craig Beattie, que tuvo que dejar su puesto al nuevo portero. Pero el conjunto de Frank Rijkaard se quedaría en peor situación cuando era expulsado Saviola, tras disponer de otra clara oportunidad al quedarse solo ante el portero y enviar el balón fuera. El argentino propinó una patada desde el suelo y sin el balón en juego a Thompson que el árbitro vio y sin dudar sacó la tarjeta roja.

Aprovechan su superioridad
Con las expulsiones el partido empezó a entender menos de esquemas y tácticas. Los escoceses, conscientes de su superioridad, empezaron a apretar fuerte arriba buscando con insistencia el gol. Así, Stilian Petrov recibió un balón en la banda derecha y puso un centro bombeado al área blaugrana. Henrik Larsson logró ganar el salto y de cabeza le puso un balón a Thompson, que libre de marca y tras dejarlo caer, lo enganchó de volea a la red.

Sin renunciar a nada
La posesión era claramente para el Celtic. Larsson estuvo a punto de sentenciar cuando Pearson le envió un pase de cabeza en el borde del área. El sueco chutó a portería sin pensárselo, pero el balón se fue fuera, a la derecha de Valdés, por muy poco. Rijkaard sabía que era vital marcar fuera de casa. Por ello sacó a Gerard López y Ricardo Quaresma por Michael Reiziger y Luis García respectivamente. El Celtic seguía llegando con peligro a las inmediaciones de la portería del Barça, pero cada vez menos.

Se acabó la racha
Los cambios en el Barcelona apenas se notaron y el resultado de 1-0, con inferioridad numérica, lo dieron por bueno. Los blaugrana rompen así la buena racha de ocho partidos consecutivos ganando, aunque saben que la vuelta, que se disputará en el Camp Nou, será muy diferente al encuentro de hoy.