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Remontada de fe

FC Rubin Kazan - Real Betis Balompié 0-2 (Global: 1-3)
Tras el 1-1 de la ida, una brillante y seria actuación del Betis metió a los verdiblancos en los octavos de final.

Rubén Castro puso el 0-2 para el Betis
Rubén Castro puso el 0-2 para el Betis ©AFP/Getty Images

El Real Betis Balompié olvidó su situación en Liga y recuperó su mejor versión para firmar una justa y moralizante victoria por 0-2 ante el FC Rubin Kazan, un resultado que dio la vuelta al 1-1 de la ida. Nono y Rubén Castro fueron los autores de los goles en un triunfo que deja a los verdiblancos en los octavos de final de la UEFA Europa League.

En la lejana Kazán, a más de 5.000 kilómetros de Sevilla, las bajas temperaturas saludaron a ambos conjuntos. La plaga de lesiones en el conjunto bético no dejó mucha maniobra a Gabriel Humberto Calderón, que salió con sus mejores hombres para prolongar la aventura europea, encomendándose tras el resultado de la ida a la calidad y el gol de su dupla atacante Rubén Castro y Leo Baptistao.

Salió valiente el conjunto verdiblanco, que tardó unos instantes en ajustar piezas y dominar el partido. Entremedias el Rubin encontró una autopista en los costados y generó peligro en el área de Antonio Adán. Pasados estos minutos, el partido sólo tuvo un dueño y ese fue el Real Betis Balompié. Con Alfred N'Diaye en el mediocentro, el Betis creció con el paso de los minutos. Dominó el esférico y jugó en campo rival. Era cuestión de tiempo que las ocasiones comenzaran a caer.

Rubén Castro inició las hostilidades con un disparo desde la frontal en el 14', Jordi Figueras mandó un balón al palo desde el corazón del área en el 25', Cedric perdonó un mano a mano ante Sergei Ryzhikov en el 40'… El Betis merecía un tanto que llegó justo antes del descanso, cuando el Rubin cometió uno de sus escasos errores en la eliminatoria, en este caso su portero.

Cuando el partido se iba al túnel de vestuarios, Nono enganchó un duro disparo desde fuera del área, Ryzhikov midió mal el disparo y se estiró para rechazar el esférico, aunque lo hizo hacia dentro y no hacia fuera, de forma que el balón acabó entrando mansamente en la portería rusa para el 0-1. El Betis hacía justicia a lo visto en la primera parte y se colocaba con el mando de la eliminatoria.

No tardó el Rubin en mover pieza. Introdujo a Mubarak Wakaso, ex jugador del RCD Espanyol, con el objetivo de dinamizar un ataque inédito durante todo el primer tiempo. El cambio y la necesidad de anotar un gol, cambió la cara del partido. Esta vez, sin embargo, el paso de los minutos favorecía al Betis y no al Rubin.

Gökdeniz Karadeniz, todo un clásico en el Rubin, fue el primero y prácticamente el único en hacer tambalear la clasificación bética. Fue con un remate en el 59' que pasó muy cerca de la portería de Adán. Adelantó las líneas el Rubin y el Betis supo aprovecharlo a través de su mejor hombre, Rubén Castro, un puñal este jueves en Rusia. Baptistao inició la contra y se deshizo de dos rivales de ceder el esférico al atacante canario, que batió al portero ruso con una jugada plena de clase, picando el esférico en preciosa parábola.

Con el 0-2, el Betis saboreó el transcurso del partido para ganar moral de cara a un tramo de temporada en donde los verdiblancos tienen prohibidos los fallos. Pero ahora era el momento de disfrutar. La aventura europea del Betis sigue viva y continuará el jueves 13 de marzo, cuando arranquen los octavos de final de la UEFA Europa League.