Un gol de penalti da la victoria a Italia

Momento decisivo
Tras un comienzo lleno de nervios entre dos equipos poco acostumbrados a jugar finales, las italianas golpearon primero y nunca cedieron la iniciativa a su rival. Parisi, que había dispuesto de un lanzamiento de falta que golpeó en el poste minutos antes, tuvo otra gran oportunidad en el minuto 71 cuando Pamela Gueli fue derribada dentro del área por Gunhild Herregården. La número 10 de Italia, marcó en las semifinales de penalti para lograr la victoria ante Suecia, y de nuevo en la final repitió, llevando el delirio a las jugadoras italianas, que celebraron el gol en el corner. Después de eso, Noruega no tuvo fuerzas para dar la réplica.

Nervios iniciales
El partido terminó con los entrenadores Corrado Corradini y Jarl Torske saludándose sobre la línea de banda, tal y como habían hecho antes del comienzo, y ese espíritu de generosidad se extendió durante varios minutos, con las jugadoras de ambos equipos regalando balones al conjunto rival. Pero estos nervios eran entendibles, ya que Noruega perdió en 2003 ante Francia en la única vez antes de este campeonato en la que había alcanzado la final. Gradualmente las cosas fueron volviendo a su sitio, y un centro de June Tårnes en el minuto 12 fue rematado por Ida Elise Enget, pero su cabezazo no llevó la fuerza suficiente para batir a la portera italiana.

Presencia de Pisano
Fueron las italianas las que llevaron el ritmo del juego, con la mediocentro Silvia Pisano demostrando su gran presencia en el centro del campo, cortando el juego del equipo rival y suministrando balones a sus compañeras, y las ocasiones comenzaron a llegar. Cristina Bonometti logró disparar con potencia al encontrar un espacio en el área cuando se cumplía la media hora de encuentro, y seis minutos antes del descanso Diletta Crespi pudo inaugurar el marcador. La jugadora italiana consiguió irse de Astrid Ree con un autopase, pero cuando se plantó ante la portera, su lanzamiento se marchó alto.

Entrada de Fusetti
Corradini hizo un cambio en el descanso, introduciendo a Laura Fusetti en lugar de Sabriana Marchese, y la sustitución dio sus frutos de forma inmediata. Tras la reanudación, Parisi, cerebro del conjunto italiano, asistió a la recién entrada, e Ingrid Thorbjørnsen tuvo que esforzarse para detener el balón cerca del poste. Mientras que la portera italiana Sara Penzo parecía una espectadora más en esta segunda parte, Ingrid Thorbjørnsen cada vez tenía más trabajo. Un tiro de Fusetti se marchó fuera por muy poco, y minutos más tarde un lanzamiento de falta de Parisi, rebotó en Alessandra Barreca y estuvo a punto de sorprender a la portera noruega. Tras el gol de penalti, no hubo ocasiones para la remontada de las escandinavas, y comenzaron las celebraciones italianas.