Una nueva final de la pentacampeona

La selección española buscará el sábado ante Rusia su sexta Eurocopa de Fútbol Sala de la UEFA después de imponerse por 1-0 a Italia en un emocionante encuentro.

Para iniciar el choque ante Italia, Venancio optó por un quinteto experto, el formado por Luis Amado, Kike, Torras, Alemao y Rafa Usín. Roberto Menichelli salió con Mammarella, Forte, Romano, Fortino y Saad Assis.

La primera ocasión cayó del lado de España, que tuvo la posesión en los primeros compases del choque. Usín probó suerte en el 1', y su disparo pegó en el lateral del poste de la meta defendida por Mammarella. Forte contestó acto seguido, deteniendo Amado su lanzamiento con la izquierda. En el 5', Lima dispuso de una clara ocasión para adelantar a Italia, pero picó la pelota en exceso.

Y solo dos minutos después llegó el 1-0. Aicardo aprovechó una jugada de estrategia a saque de banda para batir a Mamarella con la izquierda y lograr su cuarto tanto en el Europeo. Tras el gol siguió parejo el encuentro, con alternancia en la posesión y las aproximaciones a la meta rival. Se notaba que una finalísima continental estaba en juego, y ninguna de las dos selecciones arriesgaban en exceso. Por tanto, se llegó al intervalo con el único tanto del jugador del Santiago F.S.

Cerca estuvo Alemao de hacer el segundo justo tras la reanudación, pero Alemao se topó con el cuerpo de Mamarella tras una fugaz contra española. Y el meta italiano salvó de nuevo a los suyos en una volea de Kike a la salida de un córner. Y siguió con su recital el guardameta transalpino, esta vez a disparo de Borja en el 24'.

Y en el 30' pudo llegar lo que hubiera sido uno de los goles del campeonato, pero Sergio Lozano mandó la pelota fuera tras una espectacular combinación de todo el equipo español. Más cerca si cabe estuvo Alemao en la siguiente jugada, pero estrelló el balón en el travesaño.Y en la siguiente jugada, fue Usín el que se topó con el palo derecho. España había perdonado el segundo.

No quiso ser menos que su homónimo italiano, y Amado evitó el empate en dos ocasiones en el 35', tras disparos de Lima e Ippoliti. Y aún hubo un tercer lanzamiento que se estrelló en los postes, esta vez Torras al larguero a la salida de un córner.

Tuvo que arriesgar Menichelli, que decidió jugar con portero-jugador los últimos cuatro minutos. Pero no es España una selección a la que le tiemble el pulso en las grandes citas, y demostró su saber hacer con una defensa espectacular en inferioridad. Por lo tanto, el sábado ante Rusia buscará su sexto entorchado continental.