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Portugal recupera aire

Los anfitriones derrotaron a Rusia, pero "no tienen tiempo de disfrutarlo". euro2004.com recoge las reacciones de la prensa.

La pasada noche hubo alegría para Portugal y desesperación para Rusia, ya que la victoria de los anfitriones por 2-0 en el Grupo A reavivó sus esperanzas, mientras que el equipo de Georgi Yartsev quedó eliminado. Mientras tanto, Grecia está encantada de haber quedado muy cerca de convertirse en una de las ocho selecciones clasificadas para la siguiente ronda tras empatar a uno contra España, que ahora deberá afrontar unos 90 minutos dramáticos contra los portugueses el domingo. euro2004.com recoge las reacciones de los medios de comunicación de los cuatro países. 

Rusia - Portugal 0-2

En la segunda parte, no veíamos un barco viejo, sino un orgulloso yate blanco con diez diablos de mar a bordo. La lucha desesperada comenzó con la heroica actuación de Malafeev, con el novato Bugayev jugando como nunca antes lo había hecho… ¿Por qué tienen los rusos que verse ante la muerte para despertarse y mostrarse enfadados? ¿Por qué no podemos ser nosotros mismos cuando las cosas son normales? Lo insólito no sucedió, y el mar prevaleció sobre el yate. Es una amarga decepción darse cuenta de que ellos son capaces de hacer mucho más, como los griegos. (Sport-Express)

El primer partido denominado como de “todo o nada” por Scolari ya se ha conseguido, pero ahora no hay tiempo de disfrutar de la victoria porque el domingo espera España. Portugal tendrá que ganar para superar el Grupo A. El hecho de que Portugal sepa el resultado que necesita es bueno, pero los españoles no han avanzado aún … y al mismo tiempo, Grecia se enfrentará a Rusia, que ya no tiene ninguna posibilidad de clasificarse. (A Bola)

Grecia – España 1-1

Los piratas de Rehhagel han superado todos los pronósticos. Grecia está tan cerca de los cuartos de final que es increíble. Lucharon como unos leones y nunca se rindieron, pese a la presión de España en los últimos instantes del partido. ¿La receta para el éxito? Un seleccionador, 23 jugadores, 3.500 aficionados y un gran corazón. (Sportime)

Un decepcionante partido deja a España en situación crítica, sin más perspectiva que jugarse la vida frente a Portugal en Lisboa. No es el mejor rival ni el escenario más amable para resolver el inmediato futuro de un equipo que no acaba de despegar. Su industrioso juego no sirvió para marcar diferencias con Grecia, una selección integrada por jugadores expertos, sin demasiado relieve, pero con la dedicada vocación de amargar la vida a sus adversarios. A su carácter estrictamente defensivo añade una serenidad inalterable. Los griegos difícilmente entran en crisis. Parecían en su casa en la victoria frente a Portugal y nadie se desestabilizó ante España, que tomó ventaja en la primera parte y no le sirvió de nada. (El País)

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