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El Oporto no teme a nadie

Rumbo a la final: Los lusos, campeones de la Copa de la UEFA el año pasado, han realizado de nuevo una excelente campaña europea.

Ningún equipo ha ganado la Copa de la UEFA y la Copa de Europa sucesivamente en dos temporadas desde que el Liverpool FC lo consiguiera a mediados de los setenta. No obstante, el FC Porto podría lograrlo de nuevo si vence en la final de la UEFA Champions League este miércoles.

Comienzo dubitativo   
Después de conseguir el doblete en Portugal y la Copa de la UEFA el año pasado, el Oporto consiguió el pase directo a la fase de grupos de la Champions, donde se enfrentó al Real Madrid CF, Olympique de Marseille y un sorprendente FK Partizan. El Oporto disputó su primer encuentro en Belgrado, pero el gol de Costinha en el minuto 22 fue neutralizado por el tanto de Andrija Delibašic antes del descanso. Dos semanas después, el ex jugador del Sporting Clube de Portugal Luís Figo guió al Madrid a la victoria por 1-3 ante el Oporto, a pesar del gol inicial de Costinha. Tras estos resultados, los dos partidos ante el Marsella eran fundamentales para seguir vivos en la competición.

Dos victorias ante el Marsella      
La presión no hizo más que ayudar al Oporto. Primero, vencieron por 3-2 en el Stade Vélodrome a pesar de comenzar perdiendo. Después, Dmitri Alenichev, que había marcado el tercer gol en Marsella, anotó el tanto de la victoria en casa. Dos dianas de Benni McCarthy ante el Partizán aseguraron el pase a la siguiente ronda, y el empate en Madrid pudo haber sido una victoria de no ser por la mala suerte.

Lesión de Derlei    
Después de una complicada primera fase, la suerte volvió a dar la espalda al Oporto, que fue emparejado en octavos con el Manchester United FC. Además, Derlei sufrió una lesión. Sin embargo, José Mourinho alentó a su equipo para que no tuvieran miedo a nadie. En el primer partido europeo en el nuevo Estádio do Dragão, el club portugués remontó un resultado adverso para vencer por 2-1 con dos magníficos tantos de McCarthy.

El héroe Costinha         
El Manchester había llegado siete veces consecutivas a los cuartos de final, y parecía que iba a conseguirlo de nuevo en Old Trafford cuando Paul Scholes marcó. Posteriormente, otro tanto del mediapunta inglés fue anulado por un fuera de juego inexistente. No obstante, el resultado daba el pase a la siguiente ronda a los locales. En los últimos minutos, Costinha remató un rechace de Tim Howard tras un lanzamiento de falta de McCarthy para meter al Oporto en cuartos de final. 

Eliminan al Lyon       
El Olympique Lyonnais, campeón francés, era el siguiente obstáculo. Los portugueses ganaron en casa por 2-0. En la vuelta, el Lyon tenía esperanzas de remontar, pero Maniche marcó en el minuto 6, y anotó el de la victoria en la segunda mitad, tras el momentáneo empate del Lyon. Giovane Elber hizo el 2-2 en el tiempo añadido, pero el resultado en el cómputo global metía al Oporto en las semifinales.

Sólido Deportivo     
El Oporto se enfrentaba al último escollo antes de la final, el RC Deportivo La Coruña, que había remontado un 4-1 en el partido de ida ante los vigentes campeones, el AC Milan. El Depor llegó a Oporto con la intención de conseguir un buen resultado y no tener que realizar otra hazaña para superar la eliminatoria. A pesar de que Jorge Andrade fue expulsado, el conjunto gallego aguantó las acometidas lusas y conservó el 0-0 para jugarse el pase a la final en casa.

Lección táctica de Mourinho             
Muchos pensaban que el Deportivo era el favorito, pero el Oporto no había sido derrotado desde la segunda jornada de Champions, y además no había perdido en sus desplazamientos. Derlei estaba recuperado para comenzar como titular, y Costinha hizo un marcaje individual a Juan Carlos Valerón. Fue otra lección táctica de Mourinho.

El regreso de Derlei           
Valerón no desplegó en Riazor el juego que había mostrado ante el Milan, y en el minuto 60 Deco fue derribado en el área. Derlei, con frialdad, transformó el penalti que dejaba el Depor con la urgencia de marcar dos tantos. Después de que Nourredine Naybet fuera expulsado por doble amarilla, el Oporto aguantó el resultado y se metió en la final de la competición europea a la que no llegaba desde la campaña 1986/87.