La Juve, a cuartos en los últimos minutos

Por Ivan Carvalho en el Estadio Delle Alpi

Fue el cuento de dos delanteros, uno el 'galáctico' ganador de la Copa Mundial FIFA y otro, un uruguayo menos conocido con un toque de oro. Ésa fue la historia de la victoria en la prórroga de la Juventus sobre el Real Madrid CF, nueve veces campeón de Europa, que sufrió otra salida dolorosa de la UEFA Champions League.

Instinto goleador
Mientras que Ronaldo falló muchas oportunidades, Marcelo Zalayeta mostró una vez más su instinto goleador en su disparo en la prórroga que clasificó a la Juve para cuartos. Es la segunda vez que el jugador elimina a un club español, tras el gol que marcó al FC Barcelona también el la prórroga hace dos años.

Nedved, fuera
Volviendo al partido, los recuerdos del partido de vuelta de semifinales entre los dos equipos en 2003 parecía que seguían estando presentes en la mente de muchos. Esa noche la Juventus eliminó a los blancos con una victoria por 3-1, pero desafortunadamente, para el partido de este año, el conjunto local no podía contar con Pavel Nedved tras la conmoción cerebral que sufrió en el partido de ida. Eso obligó al entrenador de la Juventus Fabio Capello a emplear a Gianluca Pessotto en el centro del campo debido a que su recambio, Manuele Blasi, estaba sancionado.

Cambios
Los dos cambios principales para los visitantes, que como hace dos años ganaron el partido de ida en casa, fue la inclusión de Raúl Bravo por el lesionado Míchel Salgado y su decisión de jugar con la camiseta azul en vez de la negra habitual para los partidos fuera de casa. El entrenador Vanderlei Luxemburgo optó por Ronaldo como único delantero con Raúl González un poco más retrasado. El ex bianconeri Zinedine Zidane fue el motor de su equipo durante algunos minutos de la primera parte, donde su equipo controló la posesión del balón.

Tres delanteros
Con el organizador Nedved ausente, Capello confió en su tridente: el capitán Alessandro Del Piero, Zlatan Ibrahimovic y Zalayeta. Ibrahimovic tuvo la primera ocasión clara de gol, pero fue detenida por Casillas. A partir de ahí, el delantero sueco fue el que más peligro creó a la defensa madridista, a veces incapaz de arrebatarle el balón.

Ronaldo, decidido
Mientras el equipo de Luxemburgo estaba más atento del reloj, Ronaldo tuvo varias oportunidades claras de marcar el importante gol a domicilio que pudo haber puesto el pase en sus manos. El brasileño recibió constantemente pitos desde las gradas de un estadio Delle Alpi lleno, y el ex delantero del FC Internazionale Milano pareció estar decidido a callar a sus detractores, que habían cuestionado sus distracciones fuera del campo.

Parada de Buffon
Sus dos mejores oportunidades llegaron poco antes y después del descanso. Primero, Luís Figo le habilitó por la izquierda y el brasileño quebró al defensa Lilian Thuram para mandar un potente disparo que se fue desviado por poco. Luego, a los cinco minutos de la segunda parte, Ronaldo recibió el balón en el centro del campo, emprendió la carrera superando a dos defensas y disparó raso para que Buffon tuviera que meter la mano y desviar el balón, que llegó a tocar el palo.

Golazo de Trezeguet
En la segunda mitad, con David Trezeguet en el campo en lugar de Del Piero, Capello buscó el gol del empate y el francés cumplió. Así, el final se volvió cardiaco cuando los dos equipos se lanzaron a por el gol que los clasificara a cuartos de final.

Zalayeta, decisivo
Sin embargo, la frustración de Ronaldo sacó lo peor de él en un intercambio de golpes con Alessandro Tacchinardi en las inmediaciones del área en la prórroga. El árbitro alemán Markus Merk optó por expulsar a los dos jugadores. En cambio, Zalayeta selló la eliminación del Madrid minutos después alojando el balón en el fondo de la red de la portería de Iker Casillas para volver loca a la multitud reunida en Delle Alpi.