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Rompiendo la estadística

Hasta ahora, el Liverpool siempre quedaba eliminado si había perdido el partido de ida. Ayer logró voltear este dato ante el Chelsea.

La afición del Liverpool FC le recordó a la del Chelsea FC su falta de historia en la competición durante los prolegómenos del encuentro de vuelta de las semifinales de la UEFA Champions League.

Malos precedentes
El estadio volvió a ser una auténtica olla a presión a ritmo del ‘You’ll never walk alone’, un cántico que incluso arrancó los aplausos de la afición londinense. Sin embargo, los precedentes del Liverpool no eran nada alentadores. En las cinco ocasiones anteriores en las que el equipo había tenido que remontar un marcador adverso en casa, había acabado cayendo por el valor doble de los goles en campo contrario. Concretamente ante SL Benfica, RC Celta de Vigo, Genoa 1893, FC Spartak Moskva y RC Strasbourg.

Contra las cuerdas
Desde que se impusiese al AJ Auxerre por 3-0 en la temporada 1991/92, remontando así el 2-0 adverso de la ida, los ingleses no habían conseguido una remontada en casa. Además, ningún equipo había logrado superar una derrota en la ida de las semifinales de la competición desde que el Juventus lo hiciese ante el Real Madrid CF en 2003. Si nos centramos en la última vez que el Liverpool perdió el encuentro de ida ante un equipo inglés, las estadísticas también estaban en contra, pues cayó eliminado ante el Nottingham Forest FC en la temporada 1978/79.

Gol de Agger
Sin embargo, los fantasmas del pasado se esfumaron con el tanto de Daniel Agger a los 22 minutos, el primero para el joven internacional danés en la competición. Anfield vivía una noche mágica mientras el Liverpool se movía al ritmo de un magistral Javier Mascherano, escoltado por Jermaine Pennant y Steve Finnan por las bandas. Los de Rafa Benítez gozaron de la profundidad de la que carecieron en la ida y fueron dueños absolutos durante la primera media hora de encuentro.

Respuesta del Chelsea
Pero la historia de enfrentamientos entre ambos equipos deja claro la igualdad reinante, y el Chelsea, que no podía contar con los lesionados Ricardo Carvalho, Michael Ballack y Andriy Shevchenko, respondió. Pepe Reina tuvo que intervenir ante un remate de Didier Drogba antes del descanso y sufrió cuando a un cuarto de hora para el final su compañero Jamie Carragher a punto estuvo de despejar un balón hacia su portería al ser presionado por Drogba. Eso sí, antes de esa jugada el Liverpool ya había tenido sus ocasiones en sendos remates de Peter Crouch y Dirk Kuyt ante los que respondió de manera impecable Petr Čech.

Penaltis
Por primera vez en la historia de la UEFA Champions League una semifinal su fue a la prórroga. Y ahí el Chelsea gozó de más posesión. Kuyt cayó algunas veces en la trampa del fuera de juego y en otras topó con Čech. Drogba estuvo muy cerca del gol tras un gran centro de Shaun Wright-Phillips. Pero era un encuentro para la historia. De hecho, era la primera semifinal desde 1986 que se decidía en la tanda de penaltis. Y los números del Liverpool son extraordinarios en esta faceta, con once triunfos en doce enfrentamientos. Todos sus lanzamientos acabaron en gol, y Reina hizo el resto con dos paradas. Ahora el equipo de Anfield espera rival de la otra semifinal que enfrenta a Manchester United FC y AC Milan. Si pasa este último, se repetiría la final de 2005 en Estambul.