Frédéric el Grande
viernes, 29 de febrero de 2008
Resumen del artículo
Ningún delantero ha impactado más que Kanouté en el Sevilla. Después de marcar en cinco de las seis finales que ha jugado, el delantero le cuenta a Graham Hunter por qué el fútbol español le viene tan bien.
Cuerpo del artículo
Suena Annie Lennox cantando ‘Sweet Dreams’ mientras Frédéric Kanouté se inclina ante la pregunta de que si considera que está es el mejor momento de su carrera. La ironía aparece en el mejor momento. Estamos en el gimnasio del Sevilla FC y Enzo Maresca está haciendo sesiones de sprints con un minuto de descanso. Kanouté se toma su tiempo para dar una respuesta, parece que es la primera vez que un músculo mental ha sido necesario dentro de estas cuatro paredes. Este es un lugar para el físico, no para el cerebro, el culto y la música es como la hierba en un terreno de juego: sólo se ve cuando es malo.
“Sabor dulce”
Fredi sonríe y está de acuerdo en que el ‘Sweet Dreams’ es un tema bastante adecuado. "Desde que llegué aquí he jugado seis finales, marqué en cinco de ellas y gané otras tantas. Se podría decir que no estoy descontento. Cuando firmé, nunca había ganado un trofeo, y se me señaló como un delantero poco goleador. Ahora estoy en el mejor estado de forma de mi vida y yo tengo cinco títulos. No puedo decirle cual de ellas prefiero, marqué o no, porque nunca he levantado un trofeo sin marcar. Puede que sea similar... pero es un sabor dulce hacer un gol y conseguir un título en el mismo partido”.
Goles cruciales
Es una persona modesta. Puede llevar el peso de ser el delantero que ha logrado un mayor impacto en su club en dos temporadas con el Sevilla. El club no había ganado nada desde la Copa de España en 1948, hasta que Kanouté llegó a mitad de temporada para jugar la final de la Copa UEFA 2006. El Middlesbrough soñaba con conseguir el título hasta que Fredi fue decisivo junto a Maresca para hacer el 2-0 al cuarto de hora de encuentro. En 2006, la paliza en la Supercopa de la UEFA ante el FC Barcelona les dio otro título, con Kanouté entre los goleadores. En Hampden Park, en la final de la Copa de la UEFA 2007, el Sevilla se puso 2-1 por delante en el tiempo extra y cuando el RCD Espanyol igualó, Kanouté fue uno de los tres jugadores que marcó en la tanda de penalti. Un mes más tarde, un tanto de Kanouté le dio al Sevilla la victoria 1-0 en la final de la Copa del Rey ante el Getafe CF. Una semana antes de que diera comienzo la temporada 2007/08, fue decisivo con un ‘hat-trick’ para que su equipo se llevara la victoria ante el Real Madrid CF en el Santiago Bernabéu, dándole al Sevilla su primer triunfo de la Supercopa de España. Unos grandes dulces sueños.
El destino
Kanouté cree que el destino del Sevilla es ganar la UEFA Champions League, a pesar de la trágica muerte de su compañero de equipo Antonio Puerta y de la brusca salida del entrenador Juande Ramos hacia White Hart Line. Los aficionados del Tottenham Hotspur FC han sufrido los goles de su antiguo delantero contra ellos en dos ocasiones, incluyendo el de la victoria la pasada temporada en los cuartos de final de la Copa de la UEFA, pero también disfrutaron viendo a Kanouté ayudar al Sevilla a derrotar al Arsenal FC por 3-1 para asaltar el liderato del Grupo H. “Si la Champions League fuera un torneo de nueve meses, simplemente no podríamos ganarlo. Pero tenemos una buena posibilidad de ganarlo con este formato. Somos un gran equipo y la fase de cruces es tan compacta y tiene tantos momentos que una victoria en una eliminatoria te puede meter en la siguiente ronda. Podemos llegar a la final y ganarla”.
Un hombre diferente
No hay duda de que Kanouté ha cambiado. Una serie de terribles lesiones hicieron dudar de su rendimiento en el West Ham United FC y con los Spurs, pero él es un líder en el Sevilla. En la pasada temporada, su duodécima como profesional, mejoró su récord de goles en Liga (11 con el West Ham en las temporadas 2000/01 y 2001/02) con 21 en la Primera División y ocho más con sus conquistas de la Copa de la UEFA y la Supercopa de España. Ahora, los aficionados del Tottenham se preguntan cómo puede marcar de repente 29 goles en 47 partidos. “Ahora soy un futbolista más inteligente. Con los Spurs y el West Ham intentaba hacerlo todo en el campo, pero ahora soy más eficiente”, concluyó.
“Fútbol inteligente”
“No me gusta el comentario de que soy un delantero egoísta porque no es verdad. A veces es mejor dar un pase a un compañero y siempre lo hago. Supongo que un buen delantero debe tirar el 80 por ciento de las veces, pero también debe conocer la mejor posición y el camino más efectivo. Es fútbol inteligente. También tiene que ver con la diferente cultura futbolística que hay en España. Los aficionados quiren verte trabajar y marcar. En Inglaterra no importa si marcas o no, los seguidores aprecian que corras, trabajes y luches hasta el final”.
“Gran espíritu”
“No es tan simple como el trabajo duro contra la inteligencia, porque ha aprendido mucho en Inglaterra que me ha ayudado mucho con el Sevilla. Añadí espíritu de lucha. Aprendí a no tener miedo al contacto físico. La Premiership es quizás mi liga favorita en el mundo. El ambiente en el campo y de los aficionados es terrorífico. Esto es lo que más me gustó como futbolista en Inglaterra: el gran ambiente y la lealtad a los valores del juego”.
“Buen futbolista”
Nuestra conversación acaba. Annie Lennox se ha callado y es ahora Aretha Franklin la que exige un poco de respeto con su canción ‘Respect’. “¿Preferiría ser recordado como un ganador, un goleador, o simplemente un futbolista?”, le pregunto pensando que le respuesta es obvia. Kanouté tiene una visión amplia del futbolista: “Me gustaría ser recordado como los tres, pero sobre todo como futbolista”, dice mientras sonríe. “Jugar al fútbol me hace feliz. Marcar goles es parte de mi trabajo profesional y disfruto de ello, pero si la gente mirara atrás creo que diría: Fue un buen futbolista”. Y lo harán.
Ésta es una versión abreviada de un artículo aparecido en el último ejemplar de la revista Champions, la revista oficial de la UEFA Champions League. Para suscribirse, pinche aquí.