Torres, en la cima mundial

Fernando Torres dijo sentirse "el futbolista más feliz del mundo" después de marcar el primer gol ante el Real Madrid CF, en la victoria por 4-0 que permite al Liverpool FC pasar a los cuartos de final de la UEFA Champions League.

Sequía en el derbi
Torres llegó al Liverpool tras siete temporadas en el Club Atlético de Madrid, pero nunca había estado afortunado ante su rival en los derbis de la capital española, y sólo había conseguido marcarle un gol en diez partidos ante el Real Madrid. Su alegría era evidente después de saborear el éxito de la victoria ante los merengues. El delantero español abrió el marcador a los 16 minutos, antes de que Steven Gerrard anotara dos goles (uno de penalti), y Andrea Dossena cerrara la cuenta antes del final. El Liverpool pasa a la siguiente ronda con un 5-0 en el global de la eliminatoria.

"Portero fantástico"
Sólo la brillante actuación del meta del Madrid Iker Casillas impidió que el equipo español sufriera una derrota mas dolorosa. "Tiene un portero fantástico, uno de los mejores del mundo. Cada partido que juego contra él tiene una gran actuación, y el mejor jugador del Madrid esta noche ha sido Casillas. Gerrard me ha hecho el jugador más feliz del mundo. Ha hecho un partidazo", dijo el delantero español.

Gran intensidad
El frenético ritmo impuesto por el Liverpool en en el inicio del partido de vuelta, combinado con la pasión de las gradas de Anfield, pareció dejar helado al Real Madrid. "Estoy muy contento por cómo se ha comportado mi equipo y los aficionados. Esta es una gran noche para Liverpool. Les mostramos que esto es Anfield. Sabíamos que el ambiente iba a ser espectacular, pero ha sido incluso mejor de lo que pensábamos. Con el primer gol, ellos sabían que iba a ser muy complicado hacerle dos tantos al Liverpool, y con el segundo de penalti se acabó el partido. El plan era jugar con intensidad y buen ritmo porque el fútbol español es más lento que el inglés", comentó el nueve red.

Problemas en el tobillo
Torres fue titular por sorpresa, ya que arrastraba unos problemas en el tobillo desde el 25 de febrero en el Santiago Bernabéu, y sólo pudo probarse en el entrenamiento previo. Jugó 84 minutos antes de ser sustituído por Dossena, que cerró el marcador a dos minutos del final. Aun así, el delantero internacional español destacó que el tobillo todavía está resentido: "En el segundo tiempo me dolía un poco, pero no importa en una noche como esta. El dolor no importa. Trabajaremos desde mañana hasta el partido contra el Manchester United, el sábado, y espero estar disponible".