Maestro contra aprendiz
sábado, 22 de mayo de 2010
Resumen del artículo
Antes de que ambos se vean las caras en la final de la UEFA Champions League en Madrid, Van Gaal y Mourinho hablan de los momentos que compartieron en el Barcelona.
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La confianza es algo que nunca le ha faltado a José Mourinho, pero hay alguien que enseñó más que nadie al técnico del FC Internazionale Milano a creer en sí mismo. Y ese no es otro que el que le puede privar de conseguir su segunda UEFA Champions League: Louis van Gaal, técnico del FC Bayern München.
Van Gaal entendió rápido, cuando sustituyó a Sir Bobby Robson en el banquillo del FC Barcelona en 1997, que el ayudante del técnico inglés era algo especial. Mourinho había dado sus primeros pasos como técnico bajo la batuta de Robson. Primero lo hizo como traductor del Sporting Club de Portugal antes de seguirle al FC Porto y al Barça. Cuando Robson dejó el equipo catalán, Van Gaal acogió al portugués.
Mourinho tenía otras ofertas, pero unas palabras del técnico holandés acabaron por convencerle de que su futuro estaba en el Camp Nou. "Cuando hablé con él de la posibilidad de irme al Benfica como ayudante, me dijo: 'No, no te vayas'. Vete si es para ser primer entrenador, no de ayudante. Dile al Benfica que si quieren un primer entrenador vas, pero que si no te quedas", comentó Mourinho ante a UEFA.com.
Mourinho no se arrepentiría de quedarse en España. "Van Gaal es una persona muy segura de sí misma, y en aquel momento que yo era muy joven, eso fue muy importante. Me dio la confianza de dirigir al equipo en el campo. En partidos amistosos, partidos de la Copa de Cataluña, él me daba la responsabilidad de entrenar. Me dijo: 'Me voy a la grada, te haces cargo del equipo', y eso fue muy importante en mi desarrollo".
Van Gaal añade: "Era muy modesto entonces. Ha sido bonito ver su desarrollo, ver como ha llegado a ser un personaje. Sabía que me podría ayudar porque era muy apasionado. Pronto se dio cuenta de que lo llevaría lejos. Creo que lo eduqué un poco. Enseguida me dí cuenta de que entendía el juego". Aunque Mourinho tiene su propio estilo. "Él entrena para ganar. Yo lo hago para jugar bien y ganar. Lo mío es más difícil".
Probablemente, ninguno de los dos se imaginaban entonces que se jugarían una UEFA Champions League, con el aprendiz intentando derrotar al maestro. "La última vez que estuvimos juntos fue en 2000. De eso hace diez años, así que seguro que es una persona diferente. Pero sigue siendo un gran técnico y una buena persona. Eso no ha cambiado", dijo Mourinho.
Van Gaal ya había ganado la UEFA Champions League (con el AFC Ajax en 1995) cuando ambos trabajaron juntos, y Mourinho empató en títulos con el holandés cuando saboreó la gloria con el Oporto en 2004. De esta forma, e independientemente de quien gane el domingo en Madrid, uno de ellos acompañará a Ottmar Hitzfeld y Ernst Happel como el tercer entrenador que conquista la Copa de Europa con dos clubes diferentes.
"Más tarde o más temprano estaré en ese grupo porque soy muy joven. Espero que Dios me dé las condiciones para ello, y espero ser entrenador 20 años más, así que antes o después estaré entre ellos. Pero preferiría que fuese dentro de un par de semanas en vez de en un par de años. No porque quiera estar en este privilegiado grupo, sino porque quiero hacerlo con estos jugadores, con este club y con esta afición. Me encantaría hacerlo ahora, porque el Inter lleva mucho tiempo sin ganar esta competición", comentó Mourinho, de 47 años.
Van Gaal no es sólo el gran rival de Mourinho para el reto del sábado. El extremo holandés Arjen Robben conquistó la Premier League bajo las órdenes del técnico luso en 2005 y 2006, así que, tras ver la presión defensiva a la que fue sometido Lionel Messi en las semifinales del Inter ante el FC Barcelona, uno se puede imaginar lo que le esperará a Robben.
"Messi es Messi, pero cuando Arjen es capaz de jugar cuatro, cinco o seis meses de forma consecutiva, es un jugador increible. Es un futbolista del que siempre hay que estar preocupado, pero no cambiaré mi forma de ver el fútbol, especialmente porque él es como Messi y Cristiano Ronaldo, un jugador de movimiento. Nuestra defensa es de presión zonal, así que no cambiaremos y nos fijaremos donde Arjen necesita doble atención porque es un super jugador".
En contraste con algunos de los brillantes talentos con los que el Inter se ha cruzado en este largo camino hasta la final, Mourinho cree la ética de su equipo y el sacrificio de sus jugadores les lleven hasta el título. "El grupo es más importante que todos nosotros. Samuel Eto'o es un gran ejemplo. Es un jugador con un gran estatus, un jugador ofensivo, pero cuando el equipo está en momentos difíciles y le necesita para hacer trabajo extra, es el primero en hacerlo. Cuando uno tiene a este tipo de jugadores y son capaces de hacer esto, es fácil ser un líder". Con la moral alta, Mourinho está preparado para Madrid.