Los azulgranas se aúpan al liderato

El FC Barcelona es el nuevo líder del Grupo D de la UEFA Champions League gracias a su victoria por 2-0 ante el FC København. El conjunto azulgrana no jugó su mejor fútbol, pero con esta victoria encarrila su clasificación para la próxima fase. Lionel Messi abrió el marcador mediada la primera y aunque los locales gozaron de multitud de ocasiones, no fue hasta los últimos compases cuando cerraron el partido gracias a un nuevo tanto de Messi. Con este resultado, el Barça suma siete puntos, por seis de su rival.

Hace dos semanas el Barça se dejó la primera plaza del Grupo D en Kazán y este miércoles se plantó en el Camp Nou con la clara intención de recuperarlo. Su rival fue el sorprendente Copenhague, un conjunto que hasta este partido ocupaba el liderato tras contar sus dos primeros partidos por victorias. Para doblegar al campeón danés, Josep Guardiola tuvo que lidiar con la baja de última hora de Víctor Valdés en la portería y con la presencia en el banquillo del timón del equipo, Xavi Hernández. En la delantera, en cambio, tuvo menos dudas y optó por un triplete de muchos quilates formado por David Villa, Messi y Andrés Iniesta.

El Copenhague comenzó muy arriba, presionando con intensidad la salida de balón culé. Con las líneas muy juntas apenas se jugó en treinta metros del mediocampo, pero bastó una intervención de Messi para que el Copenhague se viera en dificultades. El argentino recogió el balón y la llevó cosida al pie hasta que abrió el esférico a Villa, que tras un recorte estrelló el balón en el larguero. Poco a poco los azulgranas comenzaron a encontrar la senda de la portería contraria ante un rival que reculó hacia su área.

Así se llegó al minuto 19, momento en que el Barcelona abrió la lata. Iniesta cedió el balón a Messi y el argentino soltó desde la frontal un fuerte zurdazo que se coló en la escuadra defendida por Johan Wiland. Con el argentino desatado, apareciendo a todos los frentes del ataque, hay que sumar el buen partido realizado por Javier Mascherano como sustento del equipo, y por Iniesta, que pasa por un estado de esplendor. La suerte, en cambio, esquivó a David Villa, que trabajó durante todo el partido en busca de los goles que necesita para alimentar su confianza. El asturiano dispuso de buenas ocasiones para ampliar el marcador pero le faltó algo de fortuna.

Bajo la batuta de Iniesta, el Barça salió tras la reanudación con ganas de cerrar el partido, pero el Copenhague ofreció resistencia y mostró su mejor versión en estos primeros compases de la segunda parte. La circulación de balón local no fue la acostumbrada en términos de velocidad y brillantez, aunque bastaba una combinación de sus hombres ofensivos para poner en jaque al Copenhague. El equipo danés, en contra de lo previsto, dispuso de la ocasión más clara del choque para firmar el empate. Dame N'Doye recogió un balón fuera del área y enganchó una soberbia volea que se estrelló en el larguero. El rechace cayó a pies de César Santin, que con toda la portería a favor mandó su cabezazo fuera.

Fue un claro aviso para el Barcelona, que buscó la sentencia con la entrada al campo de Xavi y Pedro Rodríguez, ambos recuperados de sus molestias. Villa volvió a disfrutar de un remate a bocajarro pero Wiland salvó a los suyos. Además, con el paso de los minutos el Copenhague recuperó la fe, ya que se vio con opciones de lograr un resultado positivo del Camp Nou. Al final, no logró y apenas inquietó a José Pinto más allá de aquella clara ocasión, mientras el Barcelona firmó 'in extremis' el 2-0 final con un nuevo tanto de Messi.