El Zúrich mantiene la esperanza

Con una ventaja de dos goles lograda en la ida de su play-off de la UEFA Champions League ante el FC Zürich, el FC Bayern München prepara la vuelta sin que se le pase por la cabeza la idea de no completar el trabajo este lunes.

El equipo de la Bundesliga logró dicha ventaja con los goles de Bastian Schweinsteiger y Arjen Robben la pasada semana en Múnich. Tal vez podía haber logrado una mayor diferencia en el marcador, pero aún así sigue siendo el claro favorito.

La forma en su liga del Zúrich (que es séptimo en la Super League suiza tras perder el sábado por 2-0 frente al Neuchâtel Xamax FC) ayuda poco en la generación de optimismo. Pero no todo el mundo se resigna a la derrota.

"Aún hay una oportunidad y hay que creer en ella", declaró el entrenador Urs Fischer, cuya misión es hacer "lo imposible posible". Añadió: "Lo hicimos bastante bien en Múnich y les pusimos las cosas difíciles en la primera mitad". El delantero Admir Mehmedi también tiene fe. "Sólo tenemos que hacer dos goles, todo está abierto aún", comentó.

Mientras el Bayern ya es tercero de la Bundesliga tras derrotar al Hamburger SV por 5-0 el pasado fin de semana. "El equipo tiene hambre, quiere meterse en la fase de grupos de la Champions League", comentó Jupp Heynckes.

"Nos tomamos este partido muy en serio. En nuestra casa fueron muy valientes y jugaron al ataque. No les tenemos que permitir eso. Hay algo que nunca se debe hacer en partidos de competiciones europeas: subestimar al contrario. No lo haremos. Jugaremos con el mejor equipo posible".

Franck Ribéry y Arjen Robben, ambos autores de goles ante el Hamburgo, estarán casi seguro en el once inicial tras recuperarse de sus lesiones y serán un aliciente importante para el ataque del Bayern. Para Schweinsteiger, su equipo necesita un gol fuera de casa.

"Sería positivo ponerse por delante. El Zúrich lo intentará todo con el apoyo de su afición. No se rendirá y querrá remontar el 2-0 en contra. Pero una cosa es segura, el Zúrich no va a ganar 3-0", comentó el centrocampista de la selección alemana.

Mario Gomez, que marcó su primer gol en liga de la temporada ante el Hamburgo, lo ve desde otro punto de vista. "No queremos conceder ningún gol, estamos en la Champions League. Este es nuestro principal objetivo. No pensamos en ganar al Zúrich 0-5 o 0-6. Sólo vamos allí a no conceder goles, a meternos en Champions League y después volver a casa. Eso es todo", afirmó.