Goleada, liderato y a octavos

El FC Barcelona cuajó este martes una jornada redonda para sus intereses. Venció por 0-4 al Viktoria Plzeň, alcanzó el liderato del Grupo H y consiguió el billete para los octavos de final a falta de dos jornadas. Todo en una noche de especial significado para Lionel Messi, Josep Guardiola y Víctor Valdés. Los azulgranas se jugarán el primer puesto ante el AC Milan en la próxima jornada.

El vigente campeón saltó a Praga con el conocimiento de que una victoria sellaría su pase para los octavos de final de la UEFA Champions League. El encuentro sirvió para ver el regreso al centro de la zaga de sus dos grandes pilares: Gerard Piqué y Carles Puyol. Cesc Fàbregas volvió a la titularidad y en la delantera se colocaron la nueva perla azulgrana, Isaac Cuenca, Adriano y Lionel Messi. Jugadores habituales como Andrés Iniesta, Xavi Hernández o el recuperado Alexis Sánchez esperaron su oportunidad desde el banquillo.

Con el balón en sus pies el Barcelona se movió a su antojo y Messi fue el primero en probar fortuna con un disparo lejano que se estrelló en las manos de Marek Čech. Fue la primera ocasión de un Barça que no encontraba la mejor manera de meter mano al entramado defensivo local. Cuenca y Adriano no tuvieron espacios en los costados y casi todas las acciones llegaron por la zona central con rápidas combinaciones entre Cesc, Thiago Alcántara y Messi.

Pero el Viktoria Plzeň ya había demostrado algunas virtudes en el Camp Nou, donde se mostró como un equipo muy ordenado y con las ideas muy claras. Los checos tuvieron la primera oportunidad clara con un rápido contraataque que plantó a Milan Petržela delante de Víctor Valdés, pero el guardameta azulgrana mostró sus credenciales con una parada de récord, una intervención que le permitió batir en el 38' la marca de Miguel Reina como guardameta con más minutos consecutivos imbatido en la historia del club.

La dinámica del choque cambió en el ecuador de la primera parte, cuando Messi pisó el área rival y quebró a su defensor antes de ser derribado. Penalti y expulsión para Marián Čišovský. Messi no falló en el lanzamiento y anotó su tanto número 200 con la elástica azulgrana. Con el marcador a favor y en superioridad numérica, el Barça tocó con más comodidad y pudo ampliar su ventaja con varios disparos, dos de Messi que desvió Čech y otro de Cuenca desde el balcón del área que se fue fuera por poco.

Parecía que el partido se iría con el 0-1 al descanso, pero Messi, dueño y señor del encuentro, no había dicho todavía su última palabra. Cuando el Viktoria más acusaba el esfuerzo, el argentino recogió el balón entrelíneas, tiró una pared con Adriano y no falló desde el corazón del área con un disparo raso. Tras la reanudación, una combinación entre Cesc y Messi estuvo a punto de convertirse en el tercer tanto, pero la definición del internacional español se escapó por milímetros.

El Viktoria se escondió en su madriguera durante todo el segundo tiempo en su intento de evitar un resultado más abultado. Tanto esperó atrás que el Barcelona tocó el balón mucha comodidad, convirtiendo el choque en un rondo eterno que sirvió para Cuenca mostrase su habilidad en el quiebro o para que Thiago mostrase sus dotes de cabeceador con un remate al larguero. Esta relajación también resultó contraproducente para los intereses azulgranas, ya que Petržela dispuso de una volea desde dentro del área que llevó el lamento a la grada.

El canterano Cuenca volvió a tener una gran noche y, tras su tanto de este fin de semana ante el RCD Mallorca, colocó en el 72' un medido centro desde la derecha que cabeceó a placer Cesc para llevar el tercero al marcador. Y en el descuento Gerard Piqué combinó con Messi a través un soberbio taconazo con Messi, que regateó al guardameta y anotó su particular 'hat-trick'. Ya sólo está a 33 goles del máximo goleador histórico del club, César Rodríguez. Fue la guinda a una noche redonda para los pupilos de un Guardiola que no pudo escoger una mejor manera de celebrar su encuentro 200 en el banquillo azulgrana.