Ibrahimović, listo para medirse al Barça

Zlatan Ibrahimović admitió que sabía que dejaba "el mejor equipo del mundo" cuando fichó por el AC Milan procedente del FC Barcelona en 2010, pero el delantero sueco está más que contento con su vida en Milán y se prepara para enfrentarse al que fuera su equipo en un partido que determinará muy probablemente cuál de los dos termina en la primera posición del Grupo H.

Ibrahimović pasó solo una temporada en el Camp Nou tras llegar al club desde el FC Internazionale Milano por 46 millones de euros más el traspaso de Samuel Eto'o en julio de 2009. El prolífico delantero logró 21 goles en todas las competiciones, y ayudó al equipo de Josep Guardiola a retener su título de la Liga, pero eso no fue suficiente para mantener su relación con el club español. Echando la vista atrás antes del enfrentamiento de este miércoles en la UEFA Champions League, el jugador de 30 años se mostró convencido de que su decisión de marcharse después de su primera temporada fue lo mejor para todos.

"Será un partido muy emocionante y un fantástico encuentro. Vamos a enfrentarnos al mejor equipo del mundo, sin duda. Incluso cuando me marché, sabía que dejaba el mejor equipo del mundo. Pero, para mí, y para todas las partes implicadas, creo que la mejor solución era dejar el club. Dados los resultados para ambas partes, fue la mejor solución", dijo Ibrahimović a UEFA.com.

Ambos clubes lograron grandes éxitos en la campaña 2010/11, ya que el Barça logró ganar la Liga y la UEFA Champions League e Ibrahimović ayudó al Milan a conquistar el Scudetto por primera vez en siete años. "Para mí es importante estar feliz cuando juegas. Si estás feliz, todo es mucho más fácil para ti. La forma en la que te sientes fuera del terreno de juego es la forma en la que te sientes dentro. Allí sufrí al final, así que lo mejor era marcharme. Fui un hombre, me puse de pie, encontré una solución y me marché", dijo el delantero.

"Creo que el Milan es el club más grande en el que he jugado. Aquí me sentí como en casa desde el primer día, me recibieron con los brazos abiertos. La ciudad es mi segunda casa después de Malmo, donde nací y donde pasé muchos años", continuó el jugador, que ganó tres campeonatos italianos con el gran rival de su actual equipo, el Inter.

"Alguna gente dijo que era imposible venir aquí después de haber jugado en el Inter, pero ya había fichado por el Inter procedente de la Juventus y creo que aquello fue incluso más duro. El pasado y el futuro no me importan. Solo intento dar lo mejor de mí para lograr los mejores resultados para mí y para el club al que represento", añadió.

Una lesión muscular impidió a Ibrahimović volver al Camp Nou en septiembre, ya que se perdió el 2-2 de la primera jornada entre ambos equipos. Perderse ese partido ha hecho más grandes sus ganas de jugar el miércoles, aunque afronta con cautela el que será su reencuentro con el Barcelona.

"Estaba deseando jugar ese partido. Había entrenado muy duro, pero me lesioné el día de antes del partido. Fue una gran decepción, pero para mí jugar ante un antiguo equipo no es nada personal. Por supuesto es algo emotivo, un gran partido, pero al final es como cualquier otro encuentro. No hay que darle mucho bombo", señaló.

Desde su enfrentamiento en la primera jornada, el Barcelona ha ganado todos sus encuentros en el Grupo H para certificar su clasificación para los octavos de final. El Milan también ha logrado la clasificación, aunque su empate 1-1 ante el FC BATE Borisov en el último partido permitió al Barça situarse en la primera plaza.

"Creo que gran parte de lo que nos jugamos en este partido es prestigio. Es bueno ser primeros, pero a veces es bueno lograr la segunda plaza. Ambas pueden ser positivas y negativas. Cuando estás en la Champions League tienes que enfrentarte a equipos muy buenos, y para ganar el torneo tienes que vencer a los mejores", comentó Ibrahimović.

El título de la UEFA Champions League se le resiste de momento al jugador elegido mejor futbolista de Suecia en seis ocasiones, pero eso es algo a lo que quiere poner fin, aunque si obsesionarse. "Hace unos años, era mi principal objetivo, pero si te obsesionas con algo es probable que nunca lo consigas", dijo el delantero, que ha marcado en sus tres partidos en el Grupo H hasta ahora.

"Ahora simplemente quiero luchar por todos los títulos que juego. Si puedo ganarlos, genial. Pero si no, nada va a derribar mi carrera. Todo lo que he intentado siempre era convertirme en un jugador completo, y ahora estoy bastante satisfecho. Y cuando ganas títulos, no es porque seas el número uno, sino porque tu equipo lo es", sentenció.