El Zenit partirá con ventaja en Lisboa

En un partido con un final de infarto el FC Zenit St. Petersburg acabó imponiéndose por 3-2 a un SL Benfica que se adelantó en la primera mitad. El gran protagonista de la remontada local fue Roman Shirokov, que anotó dos de los tres goles del cuadro ruso para sumar 5 tantos en siete partidos en la presente UEFA Champions League.

Con innumerables bajas afrontó el equipo de Luciano Spalletti (recién renovado esta semana) la ida de octavos de final de la UEFA Champions League. Las más destacadas la de su portero Vyacheslav Malafeev y la de su estrella Danny, ausencias que motivaron las intenciones ofensivas de un Benfica que acudió al frío de San Petersburgo con la intención de pegar un zarpazo a la eliminatoria. Y eso pese a no poder contar Jorge Jesus con su hombre referencia en el centro del campo, el español Javi García, que estaba lesionado.

Los minutos iniciales sirvieron para que los futbolistas se adaptaran a la superficie helada del Estadio Petrovskiy, en el que a la hora del comienzo del choque se registraban -9 ºC. Tras este paréntesis el Benfica empezó a enseñar los dientes encomendándose al talento de Nicolás Gaitán, y la recompensa no se hizo esperar mucho. En el minuto 20 llegó el 0-1 a favor del Benfica. Una falta en la frontal ejecutada por Óscar Cardozo no fue blocada por Yuri Zhevnov y Maxi Pereira estuvo muy listo para aprovechar el rechace y adelantar a los lusos.

Trató de responder el Zenit con un disparo de Aleksandr Kerzhakov que detuvo bien Artur. Una ocasión que tuvo efecto llamada y que motivó un adelantamiento de las lineas rusas con el objetivo de buscar el empate. Y es en estas circunstancias donde suele aparecer la pegada de Roman Shirokov, que aprovechando un centro de Tomáš Hubočan colocó el balón sutilmente pegado al poste derecho de la portería del Benfica para sumar su cuarto gol en siete partidos en la presente Champions. Poco después del gol ruso salió del campo Rodrigo para dar entrada a Pablo Aimar, que entraba tras lesionarse el delantero español en un lance con Bruno Alves.

En la recta final de la primera parte predominó el miedo a la pegada rival, pero el brío reapareció en la reanudación. Aimar cobró protagonismo en el inicio de la segunda parte y eso disparó la creatividad del Benfica. Pero la solidez defensiva del Zenit también mejoró y eso generó un partido igualado y de resultado incierto. Conforme pasaban los minutos el frío iba atenazando más y más a los futbolistas, pero de vez en cuando algún jugador del Benfica rompía las marcas y disfrutaba de alguna ocasión como fue el caso de Gaitán en el minuto 55 con un disparo con poco ángulo que se marchó por línea de fondo.

Spalletti dio entrada a Vladimir Bystrov a falta de 25 minutos para el final y en su primer balón el veterano jugador ruso tuvo una buena ocasión para adelantar a los suyos con un remate en el interior del área lusa que se fue alto. Fue el anticipo del golazo de Sergei Semak. La jugada del 2-1 comenzó con toque de espuela de Kerzhakov para Bystrov. Éste sacó un centro al punto de penalti al primer toque y ahí Semak se inventó un remate espectacular de tacón que se coló en la portería de Artur tras tocar en el poste. Con el tanto se volvió a envalentonar el Zenit y eso hizo sufrir mucho al Benfica en la recta final del choque.

Nolito entró por Bruno César para trabajar en el centro del campo los últimos minutos, pero lo cierto es que el juego se concentraba más en el área del Benfica. Kerzhakov gozó en el minuto 78 de otra buena ocasión para aumentar la ventaja, y cuando se perdona muchas veces se acaba pagando. A falta de sólo cuatro minutos para el final, y cuando el Zenit parecía tener controlado el partido, Zhevnov volvió a fallar tras un remate de Gaitán y Cardozo no perdonó prácticamente sobre la línea de gol.

Pero la locura del tramo final no terminó ahí, y en la siguiente jugada volvió a aparecer el efectivo Shirokov para marcar su quinto gol en el torneo con la ayuda tanto de Pereira, que falló en un control, como del campo helado, que le permitió fusilar ante un Artur ya batido. El 3-2 fue definitivo y ahora el Benfica tendrá que intentar remontar el 6 de marzo en la vuelta que se disputará en Lisboa.