La fe del Chelsea anula al Barça

Cuando el FC Barcelona y el Chelsea FC saltaron al campo, las emociones salieron a la luz en un Camp Nou completamente lleno. Sin embargo, en los últimos diez minutos del primer tiempo aumentaron las revoluciones.

Aunque tanto Gary Cahill como Gerard Piqué tuvieron que retirarse por lesión del partido, algo poco inusual en un primer tiempo, el Barcelona dominó por completó a un Chelsea que aguantaba como podía. Sin embargo, una gran combinación entre Isaac Cuenca y Sergio Busquets acabó con la frustración local en el minuto 35, y comenzó a vivirse el drama.

Al poco de encajar el gol, el Chelsea sufrió la expulsión de su capitán John Terry, y un inspirado Lionel Messi combinó con Andrés Iniesta para que éste hiciera el segundo gol cuando el equipo local estaba jugando con el antiguo sistema 2-3-5. Sin embargo, aún hubo tiempo para un gol un minuto antes del descanso, pero pocos esperaron que fuera obra de Ramires, que con un gran toque de vaselina marcó para el Chelsea. Fue un tanto que hubiera firmado el mismísimo Messi y un gol digno para ganar una eliminatoria.

Entonces llegó el descanso, y el fallo de penalti de Messi. Poco después, hubo otro signo de que esta no iba a ser la noche del Barcelona, cuando Daniel Alves en fuera de juego pasó para que un compañero marcara un gol que fue anulado. Y aún tuvo tiempo Fernando Torres para evitar que Josep Guardiola tuviera la satisfacción de una victoria que aún se le resiste contra el Chelsea.

Al igual que no tiene secretos el estilo de juego del Barcelona (la pregunta no es qué evitar, sino cómo hacerlo), es igual de evidente el plan seguido por el Chelsea para aguantar con diez jugadores. El esquema al final del partido era casi un 9-0-0. El juevo combinativo del Barcelona era increíble, pero no menos la determinación y entrega demostrada por los jugadores del Chelsea.

Es complicado destacar individualidades, pero Didier Drogba ayudó como lateral y fue un verdadero quebradero de cabeza para la zaga del Barça cada vez que pisaba campo contrario. Ashley Cole también se mostró infranqueable en su lateral izquierdo.

Con Terry, Ramires, Raul Meireles y Branislav Ivanović sancionados para la final, la final de Múnich será complicada para el Chelsea. Pero después de la exhibición de brega de esta noche, quizás los londinenses quieran cosas complicadas.