Festival Champions de la UEFA: día dos

La combinación del radiante sol y que este jueves es día festivo ha dado a los aficionados la oportunidad ideal para acercarse al Olympiapark para asistir al segundo día del Festival Champions de la UEFA.

Con el Olympique Lyonnais y 1. FFC Frankfurt compitiendo esta noche por la UEFA Champions League Femenina, los aficionados han tenido la última oportunidad de hacerse una foto con el trofeo antes de que fuera trasladado al estadio, donde la capitana del Lyon Sonia Bompastor lo ha alzado en el Olympiastadion de Múnich.

El amplio programa de actividades fue la forma perfecta de empezar con entusiasmo los preparativos de la final según Christian Mock, cuya hija Verena demostró sus habilidades en el adidas Brand Experience. "Es genial para los niños y las familias tener algo que hacer antes del partido. Por eso vinimos aquí, porque sabíamos que los niños lo iban a disfrutar", comentó.

"Normalmente solo vas a ver el partido, tal vez a tomar una cerveca antes de verlo, pero esta clase de cosas encantan a los niños. Hemos probado casi todo. Vimos los partidos en el mini campo junto al lago, nos sentamos en el césped a tomar el sol. Todo muy tranquilo".

Muchos aficionados llegaron pronto para escuchar al la antigua estrella de Alemania y del Frankfurt Steffi Jones hablando sobre la gran final. Como embajadora oficial de la final femenina, fue Jones la que primero pasó por el primer Google+ hangout de la UEFA, que permitió a los aficionados de todo el mundo preguntar a través de una webcam.

El ex lateral izquierdo del Chelsea FC y la selección de Celestine Babayaro también ha tomado parte del Google+ hangout en la tarde del jueves, junto a la leyenda del FC Bayern München Giovane Elber.

"Siempre he dicho que no sería entrenador. No es para mí, pero es divertido entrenar a los chicos y las chicas. Se lo están pasando muy bien. Ha hecho un gran día hoy, sobre todo después del frío del miércoles. Creo que Celestine y yo vamos a hacer un buen trabajo, muy divertido", dijo Elber.

La multitud siguió acercándose conforme se acercaba la hora de inicio del partido, y las aficiones de ambos equipos participaron en las actividades antes de dirigirse al Olympiastadion para el partido más importante del fútbol femenino.