El nuevo reto de Thiago Silva

Si Thiago Silva hubiera tenido la intención de buscar reconocimiento y fama, probablemente hubiera decidido seguir en la posición de delantero que probó durante su infancia antes de decidirse por jugar como defensa central. La adulación que los goleadores reciben no es algo que llame la atención del número 2 del Paris Saint-Germain FC, que ve el fútbol como una agradable forma a la que dedicar su vida.

"Yo siempre trato de hacer todo lo más sencillo posible y ser seguro en mi equipo, porque no tiene sentido que un defensa central se vaya arriba y quiera marcar goles. No es mi trabajo, mi trabajo es defender", dijo el brasileño.

Esa actitud, y su magnífica habilidad para defender, convierten a Thiago Silva en el sueño de todo entrenador. El técnico del PSG Carlo Ancelotti dijo de él: "Nadie tiene la atención, la velocidad y el sentido de la anticipación que tiene él. Va camino de convertirse en el próximo Maldini".

Capitán de la selecão, Silva fichó por el PSG en julio tras tres temporadas y media en el AC Milan. Su compañero Zlatan Ibrahimović, que hizo el mismo viaje pocos días antes, respalda la decisión tomada por Ancelotti. "He jugado con muchos centrales fantásticos (Thuram, Cannavaro, Piqué, Puyol) pero Silva es como todos ellos juntos. Tal vez pocos se hayan dado cuenta porque es brasileño y Brasil no es conocido por su grandes defensas, pero es el mejor del mundo".

Estos elogios no alteran la actitud de Silva: "Los elogios hay que ponerlos en práctica. Hay que estar muy centrado. Tratar de cometer pocos errores, para que esas expectativas y elogios continúen". Esta admirable ética de trabajo ayuda a explicar las fenomenales estadísticas del brasileño. En sus dos últimas temporadas en San Siro ayudó al equipo a terminar 33 partidos con su puerta a cero. En la campaña 2011/12 fue el pasador más preciso de la Serie A y también uno de los mejores cortando pases, bloqueando disparos y despejando balones en la zaga rossoneri.

No siempre todo le fue tan de color de rosa a Thiago Silva. Llegó a Europa de la mano del FC Porto (rival del PSG en la sexta jornada) cuando militaba en el Fluminense FC en 2004 a la edad de 19 años. Dos meses más tarde sufrió una tuberculosis, aunque tardaron mucho en diagnosticársela. "La enfermedad me afectó mucho, en 2005 no jugué al fútbol, fue un año triste. Cuando afronto una situación difícil ahora siempre me acuerdo de aquello y eso me hace más fuerte".

Después de una temporada en el FC Dinamo Moskva, Silva regresó al Fluminense y, tras lograr una medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de 2008, firmó por el Milan en diciembre de 2008. Ahora, con 28 años, ha madurado hasta convertirse en un futbolista formidable. "Nosotros todavía crecemos", dice Silva del PSV, que tras ocho temporadas ha regresado a la UEFA Champions League, donde alcanzó las semifinales en 1995. "No es ideal el cambiar a muchos jugadores a la misma vez, ya que se necesita un tiempo para entenderse los unos con los otros", añadió.

Al-Khelaifi ha dicho que el objetivo del club es ganar la UEFA Champions League en 2015, pero Silva sabe que el éxito no se logra solamente por el dinero y los jugadores. "El nombre del Milan es mucho más temido que el del PSG en la actualidad. El Milan ha ganado en siete ocasiones la Champions League. Volvemos a competición después de varios años, así que las personas no nos tienen todavía mucho respeto. Esto llegará con muchas victorias, con mucho trabajo y con buen fútbol. Así que ya sabemos lo que tenemos que hacer", afirmó.

Esta es una versión acortada del artículo que aparece en la última edición de la revista Champions Matchday, la cual está disponible en versiones digitales de Apple Newsstand o Zinio, además de que está en formato impreso. Usted puede seguir toda la información de la revista en el Twitter @ChampionsMag.

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