Empate de oro en San Petersburgo

El Málaga CF, como ya hiciera en la primera jornada del Grupo C, sorprendió al FC Zenit St Petersburg en los primeros minutos de partido y acabó rescatando un 2-2 que le asegura la primera plaza de su sección.

No salió con todo Manuel Pellegrini en el Estadio Petrovski. Joaquín Sánchez y Javier Saviola se habían quedado en Málaga y otros dos titulares como Isco y Weligton se quedaron en el banquillo de inicio. La rotación del chileno fue sobre todo ofensiva. Roque Santa Cruz, Diego Buonanotte y Seba Fernández encabezaron el ataque blanquiazul, mientras que la principal novedad en defensa fue la presencia del estadounidense Oguchi Onyewu. El Zenit sacó todo su arsenal para apurar sus opciones en la UEFA Champions League, y la gran novedad en su once fue la presencia del portugués Danny, que tras una larga lesión volvía al ataque del equipo de Luciano Spalletti para aportar fantasía al conjunto de la ciudad de los zares.

El cuadro ruso salió en tromba. Presionando muy arriba y con ganas de hacer daño cuanto antes. Danny se movía bien y Hulk, como siempre, intentaba aprovechar cualquier desajuste entre los centrales. Pero el equipo español iba a tirar de pegada y en su primera llegada abrió el marcador. Corría el minuto 7 cuando una apertura hacia Seba en banda acabó con un gran centro del uruguayo que remató a gol Buonanotte. Solo dos minutos después un despiste defensivo fue aprovechado por Santa Cruz para asistir a ‘Papelito’ Fernández, que al primer toque y con la zurda dejo helado al equipo de Spalletti colocando el 0-2 en los marcadores del Petrovski.

Pasaron varios minutos hasta que los rusos recuperaron el pulso. En dos minutos su clasificación para octavos se había puesto casi imposible, pero Hulk no tenía intención de rendirse y en un lanzamiento de falta estuvo a punto de recortar distancias. Rozando la media hora el brasileño volvió a probar fortuna con uno de sus potentes zurdazos, pero por suerte para Willy Caballero el balón se marchó alto. En la recta final de la primera parte, el Málaga, que nunca había dejado de crear peligro a la contra, retomó el control del partido para evitar sustos desagradables antes de emprender el camino hacia los vestuarios.

La segunda mitad arrancó con la entrada de Weligton por el amonestado Martín Demichelis. El Zenit acumuló más gente en ataque e hizo ademanes de meterse en el partido con algún disparo esporádico. Pero las caras de los jugadores rusos transmitían el golpe recibido en el primer tiempo. Solo un tanto podía devolverles al partido y Danny apareció en el minuto 49 para hacerlo. Control difícil en el interior del área y remate perfecto ajustado al poste. El 1-2 no despertó al Málaga, y el Zenit estuvo muy cerca de empatar en una ocasión clara de Aleksandr Kerzhakov que el ex jugador del Sevilla FC resolvió sin éxito.

Con la hora de partido cumplida el asedio del Zenit pasó al siguiente nivel. Internadas por ambas bandas, mucha presión en la salida de balón del Málaga y movimientos constantes en la zona de influencia de la pareja de centrales del equipo español. Buonanotte pudo evitar el sufrimiento de su equipo en el minuto 67 con una buena jugada en la frontal, pero su disparo colocado no encontró portería. Pero también fallaban los locales. Axel Witsel, que completó una gran segunda parte, puso otro balón de gol a Kerzhakov pero el ariete internacional ruso falló en el remate a apenas un metro de la línea de gol.

El último cuarto de hora fue una llamada a la épica por parte del Zenit. La acumulación de futbolistas celestes en el área de Caballero crecía minuto a minuto, y los balones largos empezaban a ser el recurso favorito de los defensores del conjunto de Spalletti. El Málaga intentaba mantener el balón para dormir el choque, pero no le duraba la posesión y eso le obligaba a defender constantemente. Finalmente en el minuto 86 llegaría el empate obra de Viktor Fayzulin, que en una jugada confusa y con varios fallos en el área acabaría rematando a la red entre una maraña de defensores blanquiazules. No hubo tiempo para más y el Málaga celebró por todo lo alto un empate que le garantiza la primera plaza del Grupo C.