La misión de Ibrahimović
miércoles, 9 de diciembre de 2015
Resumen del artículo
Quizás acaba de batir un nuevo récord del Paris en Europa pero tal y como nos explica Chris Burke, es en las rondas eliminatorias donde el delantero sueco tiene que conseguir deslumbrar.
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Durante 86 minutos parecía que el momento esperado no iba a llegar. Entonces, un pase en profundidad de Lucas y una gran finalización lo hizo oficial: Zlatan Ibrahimović había batido un nuevo récord con el Paris Saint-Germain.
El carismático jugador del club galo ha convertido en un hábito el hecho de hacer historia en el Parc des Princes esta temporada, después de que en octubre superara a Pauleta como máximo goleador de todos los tiempos del Paris antes de que el pasado fin de semana alcanzara una nueva cifra récord de goles en la Ligue 1.
La tinta apenas estaba seca después de su última gesta cuando el martes acaparó de nuevo todos los titulares tras la victoria por 2-0 sobre el Shakhtar Donetsk, partido en el que marcó su 17º tanto para les parisiens en Europa, uno más que el ganador del Ballon d'Or George Weah.
Este es el tipo de hazañas que los dueños catarís del Paris esperaban cuando ficharon al delantero sueco procedente del AC Milan en 2012. Pese a ello, Ibrahimović casi ha tenido que esperar para 2016 para conseguir sus particulares metas.
Pero el Shakhtar no iba a dárselo en bandeja de plata a pesar de que casi hace precisamente eso cuando el guardameta del conjunto ucraniano Anton Kanibolotskiy le pasó un balón directamente a Ibrahimović a los nueve minutos.
Esa ocasión terminó con un balón estrellado en el larguero y el '10' del Paris desperdició otra buena oportunidad a falta de 15 minutos para el final cuando mandó alto su disparo.
Pero como pasa la mayoría de las veces, el jugador nacido en Malmö tuvo la última la palabra. Ahora es el momento adecuado para preguntarse cuántos partidos de la UEFA Champions League le quedan con el Paris.
Con su contrato llegando a su fin a final de temporada, el delantero de 34 años podría marcharse del club el próximo verano a pesar de que el pasado mes apuntó que sus opciones siguen abiertas: "Se ha hablado mucho de esto ya que es mi último año de contrato pero solo yo decidiré qué pasará y todavía no lo he decidido".
Y que el club le ofrezca una renovación es otro asunto. Ibrahimović cumplirá 35 años el año que viene y los directivos del Paris están deseando traer a un jugador joven de talla mundial del mismo perfil.
Conseguir que llegue este nuevo jugador y mantener a su talismán parece complicado con las reglas del juego limpio financiero y en la capital gala se espera que esta sea la última campaña del internacional sueco en París y muy posiblemente también su última participación en la UEFA Champions League.
Después de no haber ganado nunca la competición, Ibrahimović está deseando dejar su huella en las rondas eliminatorias, donde generalmente ha sido parado en el pasado. De hecho, solo ha marcado siete goles en 36 partidos de las rondas eliminatorias y aunque tres de ellos han llegado desde su aterrizaje en la ciudad francesa, los equipos ante los que vio puerta fueron el Valencia y el Leverkusen.
Sus números en el torneo también se han visto afectados por las lesiones y por un par de tarjetas rojas durante su etapa en Francia pero todo eso quedará en el olvido si logra llevar al Paris hasta las semifinales o incluso la final.
Los resultados, que no los récords individuales, es lo que más permanece en la memoria de los aficionados. Y tras la eliminación del Paris en los cuartos de final las últimas tres temporadas, los seguidores parisinos esperan ahora que el equipo alcance las semifinales por primera vez desde 1994/95, momento en el que Weah causaba estragos en la delantera.