Rodillo del Nápoles ante el Benfica
miércoles, 28 de septiembre de 2016
Resumen del artículo
SSC Napoli - SL Benfica 4-2
El conjunto de Sarri lanzó un serio aviso tras golear en San Paolo al campeón portugués, que maquilló el resultado cuando ya perdía 4-0.
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El SSC Napoli logró una contundente victoria por 4-2 ante el SL Benfica, que llevaba 17 partidos seguidos sin perder entre todas las competiciones, para lanzar un aviso a Europa sobre sus intenciones en el torneo.
Dos grandes ocasiones en las botas de Kostas Mitroglou hicieron pensar que el campeón de Portugal se iba adelantar en el marcador ya que además dominaba, pero el equipo sureño fue el que marcó en el minuto 20 cuando un córner de Faouzi Ghoulam fue rematado en el primer palo por Marek Hamšík. El cabezazo del eslovaco fue imparable para Júlio César.
Tras el 1-0, el Nápoles durmió el partido hasta el descanso. Sin embargo, los napolitanos, para evitar la reacción del Benfica en el segundo acto, fueron un ciclón para sentenciar el partido en siete minutos. Dries Mertens puso tierra de por medio antes de que Arkadiusz Milik hiciera el 3-0 de penalti, mientras que el propio Mertens marcó el cuarto.
Con el partido entenciado, el equipo italiano se relajó y Gonçalo Guedes (70') y Eduardo Salvio (86') acortaron distancias para el Benfica, que maquilló el resultado pero no su floja actuación.
Jugador clave: Mertens (Nápoles)
El jugador belga completó un gran partido en el centro del campo y además se estrenó como goleador en la Champions marcando un doblete. Para el recuerdo de este partido quedará su golazo de falta. Que se lo pregunte a Júlio César, que solamente pudo seguir con la mirada la trayectoria del balón.
Hysaj y Reina, los pilares
El segundo triunfo en este grupo quizás lo empezó a fraguar el Nápoles en los primeros 10 minutos de juego, cuando Mitroglou tuvo dos ocasiones clarísimas para adelantar el Benfica. En la primera, el defensa Elseid Hysaj sacó bajo palos el tiro a bocajarro del internacional heleno, que poco después se encontró con una buena estirada de Pepe Reina. Quizás con el 0-1 el devenir del choque y el marcador hubieran sido otros.
Un ciclón para evitar la reacción
Aunque el Nápoles pudo seguir durmiendo el partido en la segunda parte como hizo en el primer tiempo tras situarse 1-0, decidió ser una apisonadora y no dejar reaccionar a su rival. Visto el guión del choque, el Nápoles sin duda pareció controlar en todo momento los tempos del encuentro y hacer que el Benfica parecíera un juguete en sus manos.
La opinión de Daniel Huerta (@UEFAcomDanielH)
A priori parecía un partido muy igualado entre los dos mejores equipos del grupo, pero el Nápoles demostró estar varios peldaños por encima de su rival, el Benfica, que ahora tendrá ante el FC Dynamo Kyiv la oportunidad de encauzar su situación en el grupo. Por su parte, el Nápoles, muy bien trabajado por Mauricio Sarri, no quiere quedarse fuera de los octavos como le sucedió hace tres años a pesar de ser el equipo que más puntos ha sumado en la fase de grupos (12) y no ha superado la ronda.