Cómo el Atlético superó al Bayern, de nuevo
jueves, 29 de septiembre de 2016
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El conjunto bávaro no había perdido desde abril, también frente al conjunto madrileño, y Joe Walker explica cómo lo han vuelto a hacer los hombres de Diego Simeone.
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Cuando el Atlético de Madrid superó al Bayern de Múnich en abril en la ida de semifinales de la UEFA Champions League, los hombres de Diego Simeone dieron su mejor versión.
Pese a disfrutar únicamente del 31 por ciento de posesión, los madrileños realizaron una presión alta y dieron el golpe decisivo antes del descanso. Algo más de fortuna habría ayudado en el potente disparo lejano de David Alaba que se estrelló en el larguero, mientras que la acción en solitario de Saúl Ñíguez tampoco terminó dentro de la red.
Cinco meses después, el Atlético realizó una secuela perfecta. Otra gran actuación defensiva y un soberbio gol de Yannick Carrasco en la primera mitad que dio a los rojiblancos tres puntos vitales para mandar en el Grupo D.
Para el Bayern fue un 'dejá vù'. Sus cuatro viajes anteriores a España habían terminado de la misma forma: en derrota y sin marcar. Además, su última derrota en cualquier competición también se había producido frente al Atlético.
Esta razón refuerza el dato de que los rojiblancos únicamente han perdido uno de sus últimos 31 partidos de competición UEFA en el Vicente Calderón y su enrtenador es un factor decisivo para ello. Simeone alineó a nueve futbolistas que ya jugaron en abril para medirse a un Bayern de Carlo Ancelotti que cayó en la trampa táctica.
Con todas las similitudes entre los dos partidos, hubo un cambio táctico realizado por Simeone que marcó la diferencia. Carrasco entró por el lesionado Augusto Fernández para dotar a la medular de una mayor proyección ofensiva y apoyar a Fernando Torres y Antoine Griezmann en punta.
Sin embargo, las bases de las victorias fueron las mismas. Zona ancha con Saúl, Gabi y Koke, infatigables, presionando y haciendo daño al rival.
Ya por delante, el Atlético se contentó con sentarse y observar su ventaja. Sin embargo, a diferencia de la semifinal de la temporada pasada en busca de un gol vital, el Bayern no suponía la misma amenaza. A decir verdad, los fieles del Calderón disfrutaron de una famosa noche europea.
El Bayern terminó el partido con un 63 por ciento de posesión, pero los locales estuvieron cómodos e incluso tuvieron la oportunidad de doblar su ventaja con un lanzamiento desde el punto de penalti.
Como en la final de la temporada pasada, Griezmann estrelló el balón en el larguero. A diferencia de en Milán, esta vez no importaba tanto en la lucha del Bayern ante rivales españoles de un Ancelotti que eliminó al Atlético dirigiendo al Real Madrid en 2014 y 2015.