Sergio Ramos, otra vez héroe blanco
sábado, 3 de diciembre de 2016
Resumen del artículo
Un cabezazo del central español con el tiempo cumplido permitió al Real Madrid cosechar un punto de oro que confirma su liderato en la Liga. Luis Suárez había marcado para el Barça.
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Cita importante y milagro de Sergio Ramos. No falla la fórmula para este Real Madrid que certificó su liderato en la Liga con un cabezazo del central español en el tiempo de descuento que evitó el triunfo del Barcelona. El 1-1 mantiene a los blancos con seis puntos de ventaja al frente de la tabla y prolonga la espectacular racha blanca de encuentros consecutivos sin perder en todas las competiciones (33).
Arrancó el encuentro sin Iniesta, falto ritmo después de superar una lesión que le alejó de los campo durante seis semanas. El Barcelona echó en falta la pausa del manchego durante buena parte del primer tiempo, aunque los azulgranas comenzaron bien el encuentro, dando ritmo y velocidad al juego. Neymar fue durante esos compases el mejor argumento de los azulgranas, profundo en el costado izquierdo como en la ocasión que finalizó Sergi Roberto y desbarató Sergio Ramos.
Sin embargo, el Madrid creció con el paso de los minutos. Los blancos se adueñaron del esférico y dejaron muy lejos de la portería de Keylor Navas a su rival, que abusó del balón largo y careció de paciencia en la construcción del juego. Apareció Marcelo, cuyas subidas exigieron muchísimo a Sergi Roberto, y también Cristiano Ronaldo, que dejó constancia de su calidad con dos jugadas individuales que obligaron a Ter Stegen. El Real Madrid sumaba méritos para abrir el marcador.
No pasaba el Barcelona buenos momentos, pero la estrategia jugó a favor de los azulgranas y le rescató al inicio del segundo acto. Fue entonces cuando Neymar colocó el esférico en el corazón del área, donde apareció Luis Suárez con la caña para poner el 1-0 en el marcador y aliviar a un nervioso Camp Nou. El tanto y la entrada de Iniesta recuperaron la versión más natural del Barcelona, que comenzó a mover el esférico.
La mejoría azulgrana y el bajón físico del Real Madrid, que acusó el esfuerzo realizado, dejaron el partido muy de cara para los azulgranas. Los blancos, en cambio, perdieron el rumbo que había dictado un gran Luka Modrić y estuvieron muy cerca de encajar el segundo tanto tras una preciosa jugada de Neymar, que encadenó recorte y disparo para fallar ante Keylor Navas.
Parecía que el Barça se llevaría el triunfo, pero fue entonces cuando emergió la figura de Sergio Ramos, que se volvió a vestir de héroe blanco como firmar un cabezazo que certifica el liderato de los blancos en la Liga.