In the Zone: los contraataques letales del Tottenham
sábado, 5 de noviembre de 2022
Resumen del artículo
El Panel de Observadores Técnicos de la UEFA analiza como el equipo de Conte superó al Marsella gracias a su habilidad para montar contraataques.
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Cuerpo del artículo
El Stade Vélodrome fue testigo del final de partido más emocionante de la sexta jornada con la remontada del Tottenham Hotspur ante el Olympique de Marsella.
En este artículo, el Panel de Observadores Técnicos de la UEFA analiza el dominio del Marsella en la primera parte y las claves de la respuesta de los spurs en el segundo periodo, especialmente con su juego de contraataque, con el que consiguieron el resultado que les llevó a los octavos de final de la UEFA Champions League, dejando al equipo francés último del Grupo D.
Goles
1-0: Chancel Mbemba (45+2)
El gol del Marsella llegó en el segundo de dos saques de esquina consecutivos, el último forzado por Amine Harit ante Ryan Sessegnon tras una combinación con Matteo Guendouzi por la derecha. Harit lo ejecutó con rapidez, y envió el balón en corto a Jordan Veretout, que envió un magnífico balón al segundo palo. Con los defensas del Tottenham algo descolocados, Mbemba, libre de marca, saltó de forma impresionante y ajustó su cabezazo abajo junto a un poste.
1-1: Clément Lenglet (54')
El origen del empate fue un lanzamiento de falta de Ivan Perišić, el tercer gol tras una jugada a balón parado de los spurs en la fase de grupos y la tercera asistencia del croata. Harry Kane forzó la falta, cruzándose a Guendouzi para provocar a una falta en el último tercio de la banda izquierda, y Perišić puso un balón con efecto casi al borde del área pequeña. El conjunto inglés tenía seis hombres dentro del área, incluidos sus tres más altos: Kane, Lenglet y Eric Dier. Dier hizo una inteligente carrera en diagonal hacia Lenglet, y Valentin Rongier (el hombre que marcaba al central francés de los spurs) no pudo evitar que se despegara del suelo para cabecear a la esquina inferior izquierda de la portería de Pau López.
1-2: Pierre-Emile Højbjerg (90+5')
El gol de la victoria del Tottenham fue un contraataque que sorprendió a un equipo marsellés volcado al ataque para intentar ganar el partido. Un despeje de Ben Davies encontró a Kane en la mitad de la cancha con sólo un central defendiendo, Mbemba. Desgraciadamente para el OM, Harit (el jugador nominalmente en la zona defensiva del centro del campo) dejó de correr cuando dos jugadores del Tottenham se lanzaron hacia arriba, dejando a Mbemba solo contra tres rivales. Kane asistió a Højbjerg, quien dio dos toques antes de disparar con fuerza para superar a Pau López desde el borde del área.
Jugador del Partido: Hugo Lloris
El observador del partido de la UEFA elogió al experimentado capitán del Tottenham por su actuación "sólida e inteligente" en una noche en la que realizó tres paradas, sobre todo una excelente para frustrar a Veretout en la primera mitad. "Fue un verdadero líder del equipo en un partido difícil y realizó paradas que lo mantuvieron en el partido", añadió el observador, que también destacó la respuesta de Lloris a los distintos retos que se le plantearon en una noche difícil para su equipo, incluyendo el saber cuándo frenar el juego.
Formaciones de los equipos
Marsella
La formación inicial del Marsella era un 3-4-2-1 aunque, en la práctica, la forma se acercaba más a un 3-4-3, con los laterales Jonathan Clauss (7) y Nuno Tavares (30) subiendo cuando tenían la posesión. Del trío de centrocampistas, Guendouzi (6) fue el más activo en el juego de construcción, aunque a veces bajaba más para crear superioridad.
Veretout (27) ayudó a cubrir la banda izquierda en las transiciones defensivas, mientras que en la derecha, Mbemba (99) cubrió el espacio por detrás de Clauss cuando fue necesario. El observador de la UEFA elogió al autor del gol del equipo marsellés por su esfuerzo, ya que siempre estuvo disponible en la elaboración y demostró valentía en su pugna con Kane.
Sin la posesión del balón, el equipo de Igor Tudor cambió a una formación 5-4-1 con los laterales cayendo junto a los tres centrales y Guendouzi y Harit (77) cubriendo las bandas. La presencia de tres centrales significaba que uno de los tres podía seguir a su hombre si caía en profundidad sin temor a dejar demasiado espacio para que el Tottenham penetrara por el centro.
En los últimos compases, el Marsella mantuvo su esquema, pero Tudor sacó a jugadores más ofensivos, como Cengiz Ünder y Luis Suárez, lo que permitió a los spurs aprovechar más espacios.
Tottenham
El equipo del norte de Londres comenzó el partido con un 3-4-2-1 en el que Højbjerg (5) desempeñó un papel fundamental como centrocampista de contención y Rodrigo Bentancur (30) operó de área a área. En la izquierda, Perišić (14) subía cuando tenía la posesión, mientras que Heung-Min Son (7) (antes de su lesión) era más profundo por dentro. En la otra banda, Sessegnon (19) se mantuvo ligeramente más profundo dejando a Lucas Moura (27) con espacio más arriba en la banda derecha y por dentro.
Sin la posesión del balón, el Tottenham se mantuvo compacto en una formación 5-4-1 con los laterales situándose junto a los centrales. Cuando defendía más arriba, la formación se transformaba en un 3-4-3 con dos centrocampistas de contención claros y los tres delanteros por delante de ellos trabajando juntos como el primero de los tres bloques defensivos.
Con Son fuera del campo y sustituido por Yves Bissouma (38), la formación de los spurs cambió a un 3-5-2 que proporcionó más jugadores en el centro del campo, con Lucas Moura (27) uniéndose a Kane (10) en el ataque.
Otros aspectos
El vídeo de arriba destaca la capacidad del Tottenham para salir al contragolpe, que fue una de las principales características de su segunda parte. El primer vídeo ofrece un ejemplo de ello, justo tras la primera hora de juego. Desde un 5-4-1, el equipo sube después de que Bentancur gane el balón en la banda izquierda. En 12 segundos, el balón cae a los pies de Kane en el área pequeña. Fue una advertencia que el Marsella no escuchó, como se puso de manifiesto en la jugada del gol de la victoria de Højbjerg en el último tramo. Una demostración, además, de la eficacia de cara a gol, que fue la diferencia clave entre ambos equipos.
Para el Tottenham, ganador del Grupo D, el tópico de un partido de dos mitades viene a cuento en el análisis general de su actuación. En el primer periodo, les costó hacerse con el balón y construir el juego, mientras el Marsella ejercía una presión casi constante. Con la necesidad de ganar, el equipo de la Ligue 1 presionó desde el primer minuto, haciendo subir a sus laterales y dominando la posesión del balón. Un planteamiento que exigía mucha energía y que, según el observador de la UEFA, puede haber sido un factor en el cambio de rumbo de la segunda parte.
Otro factor fue el mencionado ajuste táctico a un 3-5-2. En el segundo periodo, los spurs fueron un equipo distinto, un conjunto sólido que jugaba con compostura y buena organización.
Además, el observador destacó el carácter que mostraron los spurs en circunstancias difíciles, resumido por el liderazgo y el saber hacer de jugadores veteranos como Lloris, Højbjerg y Kane. En el caso de Højbjerg, su ritmo de trabajo y su actitud se resumieron en su gol de la victoria, ya que mostró la energía y el deseo de correr hacia delante con cinco minutos ya transcurridos del tiempo de descuento.
Para el Marsella, que había desperdiciado su propia ocasión de oro por medio de Sead Kolašinac, fue una dura lección sobre los márgenes de maniobra a este nivel. La falta de concentración ante un rival experimentado les costó incluso el consuelo de una plaza en la Europa League.
El observador de la UEFA destacó el buen trabajo de presión y el juego combinativo del equipo francés. Fueron capaces de crear superioridades en el centro del campo y con combinaciones de pases cortos crearon varias oportunidades en una contienda en la que tuvieron 16 disparos por siete de los spurs. Se elogió especialmente al centrocampista Veretout, que trabajó intensamente y fue inteligente en su presión y en las segundas jugadas, lo que ayudó a su equipo a establecer el control del centro del campo en la primera parte.
Otro jugador a destacar es Nuno Tavares, el lateral izquierdo que más centros a balón parado (11) realizó en la sexta jornada. Gracias a sus esfuerzos, el Marsella terminó la semana con más centros en juego abierto que ningún otro equipo (28 en total), mientras que él y el lateral del Tottenham Perišić terminaron la fase de grupos en el segundo puesto con más centros en juego abierto, con 32 cada uno. A la hora de defender esos centros, a los spurs les ayudó la supremacía en el juego aéreo, ya que ganaron el 65,2% de los duelos aéreos.
Apuntes de los jugadores y entrenadores
Hugo Lloris, portero del Tottenham: "En la primera parte, el OM jugó sin miedo a perder. En la segunda parte, tuvieron miedo a perder. Mostramos una gran personalidad en los momentos difíciles del partido".
Igor Tudor, entrenador del Marsella: "No hemos empezado bien la segunda parte. Hemos bajado el ritmo durante los primeros diez o quince minutos, hemos encajado un gol y luego hemos vuelto a empezar. Dominamos durante 75 minutos, pero está claro que no fue suficiente".
Cristian Stellini, segundo entrenador del Tottenham: "Hablamos mucho en el vestuario sobre la energía que necesitábamos en la segunda parte. En la primera parte nunca utilizamos la energía para presionar y crear dificultades, y ellos controlaron bien el juego, pero en la segunda parte este aspecto cambió y jugamos una segunda parte fantástica."