Análisis de rendimiento de la Champions League: cómo el Liverpool de Arne Slot pudo con el Real Madrid
lunes, 2 de diciembre de 2024
Resumen del artículo
La unidad de análisis de rendimiento de la UEFA examina cómo los cambios posicionales del entrenador del Liverpool marcaron la diferencia contra el Real Madrid.
Article top media content
Cuerpo del artículo
Los centrocampistas del Liverpool se llevaron merecidos elogios tras su victoria por 2-0 en la quinta jornada de la Champions League contra el Real Madrid, y también hay que elogiar al entrenador Arne Slot por un ajuste táctico en el descanso que ayudó a los 'Reds' a dominar el partido.
Esto es lo que opina la unidad de análisis del rendimiento de la UEFA, que puso bajo la lupa el trabajo del trío de centrocampistas Ryan Gravenberch, Alexis Mac Allister y Curtis Jones, e identificó la importancia de un ajuste posicional realizado por Slot durante el descanso del pasado miércoles.
Como muestra este primer gráfico, Jones fue el centrocampista del Liverpool con más pases de ruptura de líneas contra el vigente campeón (19) y, como se analizará en este análisis, parece justo sugerir que se benefició del cambio de Slot de un 1+2 en el centro del campo (con Gravenberch como único centrocampista de contención) a un 2+1, con el joven canterano jugando por delante de Gravenberch y Mac Allister.
Volviendo a la primera parte y a la disposición del Liverpool antes del descanso, este primer vídeo muestra cómo construyeron con un 1+2 en el centro del campo, con Gravenberch situado más abajo que la pareja formada por Jones y Mac Allister. Como demuestran los vídeos, dentro de esta estructura buscaban conectar con sus interiores entre líneas.
Mientras que el Liverpool dominó el primer tramo del encuentro en Anfield, el Madrid supo responder a las preguntas que se le plantearon. Trataron de bloquear las vías de pase en torno a Gravenberch (con la proyección del falso nueve Brahim Díaz) y de controlar zonalmente el centro del campo a través de Luka Modrić y Eduardo Camavinga. "Defendimos bien en la primera parte", dijo Carlo Ancelotti, mientras que Modrić añadió: "Fuimos compactos y mantuvimos las líneas cerradas".
Según Slot, había dicho a sus jugadores en el descanso: "Podéis jugar con más intensidad y podéis jugar mejor con el balón". Sin embargo, ese mensaje vino acompañado del mencionado cambio posicional a una estructura de 2+1 en el centro del campo en el segundo periodo. El objetivo era invitar a los centrocampistas del Madrid a saltar a la pareja formada por Gravenberch y Mac Allister y abrir así más espacio para Jones y los delanteros situados por delante de él, y el tercer vídeo de arriba ilustra el impacto de la intervención de Slot.
Como resultado de este cambio, el Liverpool pudo llevar a sus jugadores de ataque al espacio con más frecuencia. El gráfico anterior muestra el número de recepciones de balón entre líneas por parte del equipo local en la primera parte: 22 en total.
En la segunda parte, el número de recepciones aumentó a 31. Slot dijo después que había pedido a sus jugadores que "dejaran que se abrieran los huecos en lugar de forzarlos", pero no se trataba sólo de que sus jugadores fueran más pacientes, sino también de su cambio táctico.
Para destacar el efecto beneficioso del cambio para Jones en particular, recibió el 15% de sus pases cuando se encontraba en un espacio de diez metros o más, lo que refleja la mayor libertad de que dispuso en la segunda parte.
Aunque Gravenberch fue el centrocampista de los 'Reds' con menos espacio para trabajar, su influencia no se vio mermada en absoluto por ello, y este último vídeo ofrece ejemplos de la serenidad y la capacidad de pase del joven neerlandés.
Aunque Slot se rió de las comparaciones con Toni Kroos en su rueda de prensa posterior al partido, bromeando con que Gravenberch era "holandés y no alemán", sí se deshizo en elogios hacia él: «Siempre es útil tener jugadores que se sientan tan cómodos y dominen tanto el balón, y él lleva, junto con nuestra última línea, el balón hacia los jugadores que pueden hacer daño a cualquier rival. Eso es lo que le hace especial junto con su capacidad atlética; no para de correr".
TEMA DE DEBATE: cambiar el rumbo del partido
La contienda táctica del pasado miércoles en Anfield (y ese ajuste fundamental realizado por el equipo técnico del Liverpool) dio pie a un debate más amplio entre el grupo de observadores técnicos de la UEFA sobre los cambios en el juego en el fútbol de élite actual.
Según Gareth Southgate: "El cambio relativamente reciente de las reglas para permitir cinco cambios (y un sexto en la prórroga) ha supuesto que haya más posibilidades que nunca de efectuar cambios en un partido, ya sea un ajuste táctico, un perfil diferente de jugador o la oportunidad de refrescar la energía del equipo".
Para Roberto Martínez, la posibilidad de cambiar la mitad del equipo a lo largo de un partido significa que los entrenadores cada vez se fijan menos en un sistema rígido. "Los equipos se han vuelto flexibles y polivalentes en su forma de jugar, simplemente porque el número de sustituciones lo cambia todo", explica el seleccionador de Portugal.
En opinión de Roberto Martínez, el entrenador de hoy "puede dar una buena estructura al equipo y a partir de ahí ser muy abierto en los diferentes planteamientos tácticos. Es más, el entrenador moderno trabaja los conceptos, la forma de jugar, y luego puedes utilizarlo en diferentes estructuras tácticas y ser más flexible en relación a los jugadores que puedes tener en tu once inicial".
Rui Faria afirmó que "la capacidad de leer rápidamente el partido y entender lo que está sucediendo y por qué está sucediendo... es una habilidad fundamental", y cree que un entrenador puede prepararse, hasta cierto punto, estudiando al rival y "sus cualidades, cómo ha actuado contra otros equipos y qué tipo de soluciones ha utilizado. Intentas anticipar diferentes escenarios, poniéndote en su lugar e imaginando qué tipo de problemas pueden crear a tu equipo".
Por último, volviendo a Southgate, recordó la semifinal de la EURO 2024 de Inglaterra contra los Países Bajos como ejemplo del flujo de cambios (de ambos bandos) que puede producirse, y que pone a prueba a los entrenadores.
"Los neerlandeses cambiaron sus estructuras habituales con la idea de que empezaríamos con cinco defensas", explicó Southgate. "Luego alteraron su plan al hacer un cambio forzado durante la primera parte, y de nuevo en el descanso. Fuimos capaces de reaccionar a estos cambios, sobre todo gracias a la inteligencia individual y la adaptabilidad de Bukayo Saka, a quien pudimos pedir que defendiera como carrilero, o que se metiera por dentro como centrocampista, o como extremo estrecho. También alteró la presión de nuestros centrocampistas avanzados".
"En el descanso decidimos arriesgar con Luke Shaw, que regresaba de una lesión, para darnos un mayor equilibrio por la izquierda, y más tarde cambiamos el perfil con Ollie Watkins como delantero centro y Cole Palmer para ofrecer una amenaza ofensiva diferente. Por supuesto, cuando luego marcas el gol de la victoria a través de un suplente que crea para otro, es el escenario soñado".