El 'maestro' Luis Enrique logra un cambio de mentalidad que lleva al Paris a la final de la Champions League
jueves, 8 de mayo de 2025
Resumen del artículo
El reportero de UEFA.com en la capital francesa analiza el papel de Luis Enrique a la hora de guiar al Paris a su segunda final.
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Qué diferencia hace un año. En 2024, fueron la diligencia y la resolución defensiva del Borussia Dortmund las que rompieron los corazones parisinos. El pase a la final de Wembley se les escapó de las manos, pero el fracaso aviva el fuego. En su lugar, Múnich (la casa del club que derrotó a Paris en la final de 2020) será el escenario de la última cita de 'Les Rouge-et-Bleu' con el destino. ¿Ha llegado su hora?
En declaraciones a la televisión francesa tras la victoria de su equipo en semifinales contra el Arsenal, Luis Enrique destacó el contraste entre este año y el anterior: "Creo que hicimos un buen trabajo la temporada pasada, pero no fue suficiente". Esta campaña, sin embargo, ha traído renovado vigor y compromiso: "Cada entrenamiento ha sido de alto nivel, los jugadores han estado excepcionales".
Los equipos jóvenes (en edad, experiencia o exposición al proyecto) necesitan un entrenador proactivo que se atreva a creer en su filosofía. Enrique personifica esa convicción personal. Ganador de la Champions League con el Barcelona en 2015, es un firme creyente en el trabajo duro implacable y el compromiso inquebrantable con la mejora.
"El portero les dio la victoria en el partido"
Desde la perspectiva parisina, nadie encarna mejor este último punto que Gianluigi Donnarumma. "El mejor jugador en los dos partidos fue su portero", declaró el técnico del Arsenal, Mikel Arteta, en su rueda de prensa posterior al partido. "El portero ganó el partido para ellos, en las dos eliminatorias".
Después de realizar cinco paradas decisivas en el norte de Londres, el imponente guardameta protagonizó nuevas proezas en la capital francesa, al detener con maestría a Martin Ødegaard y Bukayo Saka.
Otra pieza clave del PSG fue el Jugador del Partido, Achraf Hakimi. El internacional marroquí, lateral derecho por naturaleza, marcó en la segunda parte un gol con la intuición de un delantero. Tras el pitido final, el jugador de 26 años elogió a su entrenador. "Ha hecho un trabajo increíble desde que llegó", declaró Hakimi. "Ha creado un equipo fantástico, y eso conlleva mucho trabajo. Es un maestro".
Luis Enrique, cauto con el Inter
Tanto Donnarumma como Hakimi se han beneficiado del toque de Midas de Luis Enrique. Sin embargo, el capitán Marquinhos es el hilo que une a este nuevo equipo parisino con su pasado. Único superviviente de aquella derrota ante el Bayern en 2020, el internacional brasileño carga con las cicatrices: "Sé cuánto duele perder una final", asegura. Esa angustia es algo que dice que "transmitirá a sus compañeros".
Así que la atención se centra en Múnich, donde acecha el Inter, un equipo "fuerte con y sin balón", según Luis Enrique. La madurez y el ingenio de los 'Nerazzurri' no pasan desapercibidos para el entrenador de 55 años, que añade: "Tienen más experiencia que nosotros, no sólo en términos de edad, sino que el club ha ganado tres Champions League". El París, reconoce, "sólo tiene dos finales" en su haber. Pero, como muchos han observado al comparar esas dos épocas parisinas, ha habido un cambio de mentalidad; un cambio influenciado e informado por el técnico asturiano.