Análisis de rendimiento de la Champions League: el Liverpool supera al Atlético gracias a su capacidad de adaptación, su presión y su fortaleza mental

¿Cómo se gana un partido de la UEFA Champions League? La respuesta sencilla en Anfield el miércoles por la noche la dio Virgil van Dijk con su cabezazo en el minuto 92.

Sin embargo, la realidad que reveló el partido tan reñido entre el Liverpool y el Atlético fue que una competición europea de élite pone a prueba a los jugadores y entrenadores de muchas maneras.

"Una de las cosas que hay que tener es la mentalidad, la forma física, pero también se necesita calidad", dijo el entrenador del Liverpool, Arne Slot, justo después de la victoria por 3-2.

La unidad de análisis de la UEFA y el observador técnico de la UEFA Rafa Benítez exploran las exigencias de un partido con cambios de ritmo y requisitos tácticos variables, en el que la capacidad de adaptación de los 'reds' resultó decisiva.

El buen comienzo de los locales

Las excelentes combinaciones de movimientos y pases del Liverpool le permitieron desbloquear el bloque bajo del Atlético en los primeros compases del partido y ponerse con una ventaja de 2-0. Como explicó el observador técnico de la UEFA Benítez en su análisis posterior al partido, su velocidad y fluidez abrieron espacios que pudieron aprovechar en el sector ofensivo.

"Jugaron rápido entre líneas y tenían jugadores que avanzaban al recibir el balón", dijo el exentrenador del Liverpool.

El vídeo anterior muestra un ejemplo de la capacidad del Liverpool para crear espacios entre líneas: cómo Florian Wirtz retrocede para encontrar el espacio que ha dejado libre Ryan Gravenberch con su movimiento en dirección opuesta. El movimiento de Jeremie Frimpong fue importante por la misma razón.

Este gráfico ilustra la formación del Atlético en un bloque bajo 5-4-1 durante los primeros 15 minutos, y muestra la posición media de los jugadores. Para superar ese bloque se requería un pase rápido e incisivo y una excelente toma de decisiones.

Elogios a la presión

El segundo punto a destacar es la intensidad de la presión del Liverpool, que tomó las riendas del partido. "Lo más importante es que todos los delanteros, centrocampistas y defensas, especialmente los laterales, presionan muy arriba", afirmó Benítez.

Como muestra de ello, el Liverpool terminó el partido con casi el doble de recuperaciones de balón en el campo contrario que el Atlético, con 18 frente a las diez de los visitantes, a pesar de tener más posesión.

"Fueron más fuertes en los duelos", añadió Benítez, elogiando su capacidad para "presionar con intensidad y recuperar rápidamente el balón cuando lo perdían, ganando los segundos balones".

El vídeo anterior muestra un excelente ejemplo de la presión del Liverpool. Desde un bloque bajo, terminan obligando al Atlético a retroceder al presionar arriba. Finalmente, Dominik Szoboszlai bloquea un pase de Pablo Barrios y crea una oportunidad de tiro para Mohamed Salah.

La respuesta del Atleti

A medida que avanzaba el partido, el Atlético logró hacer retroceder al Liverpool. "Entre los minutos 15 y 20 empezamos a demostrar que estábamos en el partido", declaró el entrenador Diego Simeone.

Con Julián Alvarez lesionado y Alexander Sørloth comenzando en el banquillo, el Atlético jugó sin un delantero centro, como muestra el gráfico anterior. En algunos momentos, esto planteó a los defensas del Liverpool la duda de si debían salir o no.

El vídeo que se muestra a continuación muestra cómo el Atlético avanza con esa delantera de cuatro, con los dos delanteros centrales, Antoine Griezmann y Giacomo Raspadori, retrocediendo para ayudar a construir desde el centro del campo. El equilibrio defensivo del Atlético les ayudó a contener al Liverpool.

Aunque el primer gol de Marcos Llorente al filo del descanso dio alas al Atlético, el Liverpool estuvo siempre alerta ante el peligro, con una defensa liderada por el excelente Van Dijk en una noche en la que los goles esperados (xG) final del Atlético fue de 0,56 frente al 2,72 del Liverpool.

La amenaza de contraataque de los 'reds' en la segunda mitad

Simeone admitió después que sufrieron con contraataques como consecuencia de tener que buscar el partido y empatar 2-2.

El siguiente vídeo muestra un ejemplo perfecto de una bonita jugada de contraataque del Liverpool, que sale disparado desde su propia área en una acción liderada por Wirtz y Szoboszlai y que termina con un disparo de Salah al poste.

Desde el punto de vista del entrenamiento, cabe destacar la velocidad y precisión de los delanteros del Slot, que avanzan por el campo con el mínimo número de toques: solo ocho entre el cabezazo defensivo de Van Dijk y el remate de Salah.

Para Benítez, esto puso de relieve la capacidad del Liverpool para adaptar su juego en función de la situación. Según él: "El Liverpool tiene una idea clara: mantener un ritmo alto cuando tiene la posesión y asegurarse de presionar rápidamente cuando pierde el balón. Pero si tiene que cambiar y jugar con un bloque bajo o medio para defender y contraatacar, puede hacerlo porque sabe que tiene velocidad y capacidad en la delantera".

"Dominaron claramente la primera parte, presionando con intensidad y moviendo el balón rápidamente, pero cuando tuvieron que defender o empezar a jugar un poco más atrás y al contraataque, también fueron capaces de hacerlo".

El final del partido

"Si quieres ganar a un equipo como el Atleti, tienes que demostrar que también puedes ganarle con mentalidad», afirmó Slot, y los 11 minutos que transcurrieron entre el empate de Marcos Llorente y el gol de la victoria de Van Dijk demostraron esa fortaleza mental, ya que lograron la victoria en los últimos minutos por quinto partido consecutivo.

Slot elogió la capacidad de su equipo para "empujar una vez más" y el último vídeo muestra cómo presionaron al Atlético mientras buscaban oportunidades para meter el balón en el área. Finalmente, en su segundo córner, consiguieron su tercer gol.

Para poner en contexto esta presión tardía, entre el minuto 76 y el pitido final, el Liverpool generó diez saques de esquina y centros en jugada, solo uno menos que el total acumulado hasta ese momento del partido.

Benítez, cuyo propio equipo, el Liverpool, logró remontar un 3-0 en contra para ganar la final de la Champions League en 2005, reflexionó: "El hecho de que hayan marcado goles en los últimos minutos en varios partidos demuestra que tienen la convicción de que "lo volveremos a conseguir". Es un círculo virtuoso. Tienen la convicción, la energía y la capacidad para hacerlo".