Análisis del Trabajo en Equipo Perfecto en la Conference League: las combinaciones del Rayo Vallecano y el Strasbourg

Los observadores técnicos de la UEFA Mixu Paatelainen y Haakon Lunov analizan en profundidad dos goles de las primeras fases de la competición, el de Fran Pérez contra el Shkëndija y el de Abdoul Ouattara contra el S. Bratislava, destacando el denominador común de la inteligencia colectiva: una construcción paciente en el centro del campo seguida de combinaciones rápidas y oportunas que aprovechan las superioridades.

Cada jugada pone de relieve cómo el entendimiento relacional compartido permite a los equipos romper las líneas defensivas y crear situaciones de remate de gran valor.

Gol 1: Jornada 1 – Fran Pérez (RAYO VALLECANO - Shkëndija)

Mixu Paatelainen sobre el gol de Fran Pérez:

"Una combinación bien ensayada en la fase de creación del mediocampo comienza con el jugador exterior entrando hacia dentro y conectando con el centrocampista para encontrar al lateral que se superpone en el canal exterior.

En la fase final, se desarrolla una brillante secuencia de pases rápidos y al primer toque. Ya posicionado en la última línea, el lateral izquierdo Alfonso Espino realiza un pase perfecto de primeras a la espalda de la defensa rival. Un sutil movimiento opuesto de Álvaro García le asegura permanecer en posición legal.

Fran Pérez realiza la carrera de apoyo por el centro, manteniéndose por debajo del balón en todo momento antes de engañar al portero y marcar con un remate controlado con la derecha".

Haakon Lunov sobre el gol de Fran Pérez:

"Este gol es fruto de un gran esfuerzo colectivo: seis acciones de cinco jugadores diferentes en solo 13 segundos. El momento crucial llega cuando el centrocampista Unai López decide pasar el balón al lateral izquierdo Alfonso Espino.

En ese instante, el equipo muestra una clara estructura de ataque: los dos jugadores más alejados corren por detrás, mientras que los dos jugadores centrales se mueven hacia el balón. Estos movimientos opuestos crean incertidumbre en los defensas, que no saben si "seguir la amenaza delante o detrás de mí".

También hay un entendimiento común de lo que va a suceder una vez que Unai López elige la opción por la banda. Álvaro García gira inmediatamente para atacar en profundidad, mientras que Sergio Camello imita el movimiento en el centro. En el lado opuesto, Fran Pérez ataca el espacio creado por la carrera de Sergio Camello y finalmente remata la jugada.

Todo esto se desarrolla en los últimos cinco segundos del ataque, con las tres últimas acciones a un solo toque y a una distancia de 40 metros. Estos parámetros (tiempo, distancia, toques y número de jugadores) ponen de relieve tanto la velocidad como la coordinación necesarias.

Incluso si Unai López hubiera elegido otras opciones, como pasar el balón a Álvaro García o Sergio Camello, o lanzar directamente a Fran Pérez, la estructura colectiva y los movimientos sincronizados sugieren que se habrían producido patrones similares.

La organización y la sincronización de estos movimientos tan diferentes pero simultáneos son los factores clave del éxito de este gol".

Gol 2: jornada 1 – Abdoul Ouattara (Slovan Bratislava - STRASBOURG)

Mixu Paatelainen sobre el gol de Abdoul Ouattara:

"Este gol se basa en la paciencia durante la fase de creación en el centro del campo, seguida de una rápida combinación de un solo toque para abrir la oportunidad.

El rápido intercambio de un solo toque entre Abdoul Ouattara y Rafael Luis en el centro del campo es crucial, ya que les permite liberar a Martial Godo en la banda. Godo entonces realiza un pase perfectamente medido y sincronizado por detrás de la defensa, lo que permite a Ouattara llegar y rematar en el segundo palo".

Haakan Lunov sobre el gol de Abdoul Ouattara:

"Este gol es un ejemplo clásico de los principios del "regreso a la escuela": aprovechar una sobrecarga en el último tercio del campo mediante un entendimiento relacional compartido. Una vez que Godo recibe el balón en los pies y se crea la superioridad, se convierte en una situación que puede considerarse como cuatro contra tres, tres contra dos o, simplemente, el dos contra uno clave entre Godo y el eventual goleador Ouattara.

Cuando Godo recibe el balón, debe mantener la velocidad hacia adelante sin cerrar el espacio que Ouattara pretende atacar. Necesita atraer al defensa lo suficiente como para crear ese espacio, permitiendo que Ouattara se cuele por detrás. Esto obliga al defensa a tomar una decisión difícil y es el momento en el que Godo debe elegir entre pasar a Ouattara, conducir él mismo o jugar por dentro.

En este caso, opta por pasar a Ouattara. El momento de la pases es crucial. Obsérvese cómo Ouattara señala con el brazo, indicando dónde quiere el balón, probablemente apoyado en señales verbales. El éxito de la acción depende en última instancia de la ejecución técnica de Godo y de la precisión del pase.

Todo ello refleja un trabajo en equipo relacional en capas, del tipo que se desarrolla normalmente en los primeros años de un jugador, cuando se aprende por primera vez la comprensión fundamental del juego combinativo y el aprovechamiento de la sobrecarga".