Alemania quiere cambiar su historia ante Italia

Alemania contra Italia. Todo el mundo sabe que la selección del sur de Europa es la némesis de la Mannschaft. Ambas selecciones han levantado cuatro veces la Copa Mundial de la FIFA, y Alemania ha ganado tres Campeonatos de Europa de la UEFA por solo uno de Italia, pero de los ocho partidos en los que se han enfrentado en ambas competiciones en ningún partido han conseguido ganar los alemanes.

Todo empezó en la semifinal del Mundial de 1970, apodado el 'Partido del Siglo', que termino 4-3 tras la prórroga. Los italianos también vencieron en la final del mundial de 1982 por 3-1 y continuaron con su particular cuento de hadas venciendo en las semifinales de 2006 por 2-0, lo que silenció afición alemana congregada en Dortmund. También ha habido cuatro empates, dos en cada competición.

El último choque entre ellos fue en Varsovia en la semifinal de la UEFA EURO 2012, y el resultado es por todos conocidos. En principio, parecía claro que Alemania sería la selección vencedora. Habían arrasado en la clasificación ganando todos los partidos y continuaron con esa racha en un grupo complicado, superando a Portugal, Holanda y Dinamarca. Más tarde eliminaron a Grecia en los cuartos de final.

Italia, por el contrario, no fue tan impresionante. Quedó segunda en su grupo, solo un punto por delante de Croacia, y necesitaron de los penaltis tras el 0-0 ante Inglaterra tras los 120 minutos de los cuartos de final.

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La táctica ofensiva de Alemania en aquel partido fue algo bastante complicado de analizar. Toni Kroos fue el encargado de la creación del juego, un papel que solía desempeñar Mesut Özil, que se colocó en la banda derecha. Marco Reus, que estuvo genial ante Grecia, comenzó ese partido desde el banquillo. El objetivo era tener más controlado al guía de Italia, Andrea Pirlo.

"Todo el mundo comete errores, incluso los entrenadores. El error estuvo en la idea de intentar mantener a Pirlo fuera del partido, pero no funcionó. Por supuesto, fue mi responsabilidad. A veces ocurre eso en algunos partidos. Crees que has escogido la mejor alineación y te equivocas. Luego llegan los errores individuales, como el del gol de Mario Balotelli. Estaba libre de marca tras un córner. Ninguno de nosotros estuvo bien ese día”, comentó Joaquim Löw el martes con la confianza de un hombre que ha ganado un Mundial.

Sin embargo, el seleccionador alemán cree que ese revés fue el que les llevó a tocar la gloria en Brasil. "En parte, nos ayudó un poco. Estábamos buscando qué hicimos mal y esa derrota personalmente me ayudó mucho para mejorar. Fue una gran lección", dijo Löw.

El balance de esta rivalidad, amistosos incluidos, no es muy alentador para Alemania. Ocho victorias alemanas por las 15 de Italia, además de diez empates. Se puede agarrar a un clavo ardiendo contando el empate a cero en la EURO 96 que sirvió para eliminar a Italia. Un torneo que finalmente ganaron los alemanes. "No creo que tengamos un complejo con Italia. Aquellos partidos los jugaron equipos diferentes en escenarios diferentes", concluyó Löw.