Trayectoria de Portugal en semifinales: emoción garantizada

1984: Portugal - Francia 2-3, t.p. (Domergue 24', 114', Platini 119'; Rui Jordão 74', 98') 
Uno de los grandes clásicos de la historia de esta competición. Fue un partido de ida y vuelta en el que abrió fuego Jean-François Domergue antes del empate de cabeza de Rui Jordão. Desde ese tanto el partido fue un ida y vuelta en Marsella, con los ataque cambiando de área constantemente. Jordão adelantó a Portugal finalmente y a partir de ahí comenzó el asedio galo. Domergue hizo el 2-2, permitiendo al capitán francés Michel Platini (que había dado las dos asistencias en los dos primeros goles) hacer el gol de la victoria con su octavo tanto del torneo.

2000: Francia - Portugal 2-1, t.p. (Henry 51', Zidane 117' pen; Nuno Gomes 19')
Portugal rompió el empate con su primer gol a los 19 minutos, pero Francia estuvo a la altura logrando el empate por medio de Thierry Henry. Abel Xavier estuvo a punto de marcar para los lusos en el tiempo de descuento, pero finalmente fueron 'les bleus' los que se metieron en la final gracias a un gol de penalti de Zinédine Zidane en el minuto 117 de la prórroga después de una mano de Abel Xavier tras un remate de Sylvain Wiltord. Francia ganaría más tarde la final de Bruselas con un gol de oro.

2004: Portugal - Holanda 2-1 (Ronaldo 26', Maniche 58'; Jorge Andrade p.p. 63') 
Un gran tanto de Maniche acaparó todas las miradas en Lisboa cuando Portugal se convirtió en la primera anfitriona de la EURO en dos décadas que lograba clasificarse para la final. Liderada por Luis Figo, inspirada por Deco, y firme gracias a una fuerte defensa que contaba con Ricardo Carvalho, la 'selecção' se colocó por delante gracias a Ronaldo, entonces un joven de apenas 19 años. Pese a ello, Portugal estuvo cerca del desastre. Primero Jorge Andrade se metió un gol en propia puerta y después Roy Makaay estuvo a escasos centímetros de colocar el empate en el marcador para la 'orange'.

2012: Portugal - España 0-0, España ganó 4-2 en los penaltis
Cuando apenas quedaba un minuto por disputarse del partido frente a la vecina España en Donetsk, Raul Meireles entró por el centro y allí, a la izquierda, se encontraba un desmarcado Ronaldo. El capitán de Portugal, extrañamente, mandó su disparo fuera. Tras una prórroga sin goles, el encuentro se decidiría en los penaltis, donde los fallos de João Moutinho y Bruno Alves permitieron a Cesc Fàbregas dar la victoria a la entonces campeona, una España que acabaría revalidando el título.