Blanc asume el resurgir de Francia
miércoles, 6 de octubre de 2010
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El seleccionador espera que todos sus conocimientos acumulados durante su larga trayectoria profesional le sirvan para situar de nuevo al país galo en lo más alto del panorama internacional.
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No es necesario que un entrenador tenga grandes jugadores para lograr el éxito al más alto nivel. José Mourinho es el mejor exponente de ello. Por ese motivo Laurent Blanc confía en que su inmensa experiencia como jugador le sirva para volver a situar a Francia en el lugar que debe en el panorama internacional.
El ex jugador de FC Internazionale Milano y de Manchester United FC disfrutó de una gran carrera profesional a nivel de clubes aunque sus mayores logros llegaron con su selección, Francia. Blanc fue miembro integrante de la selección que ganó la Copa Mundial de la FIFA de 1998 y el Campeonato de Europa de la UEFA de 2000. El ex defensa, de 44 años, fue internacional en 97 ocasiones y portó el brazalete de capitán en ocho ocasiones, y para él, ahora es todo un honor dirigir al combinado francés.
"El de seleccionador nacional es un trabajo que todo el mundo sueña con tener. Sirves a tu país, representas a tu nación. El equipo nacional siempre fue muy importante para mí personalmente a lo largo de toda mi carrera como jugador, y ahora que soy seleccionador me ocurre algo muy parecido. Poder convertirme en seleccionador nacional de Francia es todo un honor, y he aceptado esta posición con mucho orgullo", declaró a UEFA.com
Blanc ha logrado el puesto de sus sueños pero tuvo un inicio digno de cualquier pesadilla. En su primer partido oficial al cargo Francia fue derrotada por Bielorrusia en París el pasado 3 de septiembre. Además lo hizo en el Stade de France, campo donde se alzaron con la corona de campeones del mundo en 1998 y donde llevaban 11 años sin conocer la derrota. Aquel partido fue muy doloroso para un hombre conocido como 'Le Président' ('El Presidente').
"Creo que la derrota en París fue muy difícil de superar, incluso aunque no jugamos de un modo fantástico, no merecimos perder. Los jugadores tenían miedo porque empezamos del peor modo posible", recalcó el ex técnico del FC Girondins de Bordeaux.
Los contratiempos son parte del juego y para Blanc no había tiempo para las lamentaciones. Así que se apresuró en motivar a sus jugadores. "Tienes que decirles que tienes confianza en ellos porque de otra forma no les hubieras elegido para estar en la selección. Había que decirles que sabía que eran mejores de lo que habían demostrado ante Bielorrusia, pero que en el fútbol no siempre el mejor equipo gana", comentó Blanc.
Francia ha sufrido etapas difíciles en numerosas ocasiones, incluso Blanc experimentó un proceso similar a mediados de la década de los noventa cuando una nueva generación de jugadores tardó mucho tiempo antes de despuntar. Ahora su objetivo es comenzar un nuevo ciclo lleno de éxitos con Francia. "Cuando hay un problema de transición, a menudo se debe a un cambio generacional. Ahora estamos intentando empezar de nuevo con una nueva hornada con algunos jugadores buenos que todavía no son grandes jugadores", añadió el técnico.
Les Bleus no lograron la clasificación para la Copa Mundial de la FIFA en 1990 y 1994 antes de lograr una selección fuerte capaz de ganarlo todo. Blanc recuerda aquel "perfecto espíritu de equipo" de finales de los noventa y añade: "Había jugadores que eran grandes estrellas en sus respectivos clubes pero todos ellos estaban a disposición de su selección, del equipo nacional. Eso es algo que tenemos que tratar de lograr de nuevo, hay que recuperar algunos valores que se han perdido en la selección de Francia".
Blanc está convencido de que su inmensa experiencia a nivel de clubes le va a ayudar mucho en su actual cargo. "Me permite tener muchas vivencias que compartir con los jugadores franceses que están en los principales clubes de Europa. Por muchas razones, eso me da cierta credibilidad de cara a ellos. Cuando hablamos, les digo que ya sé lo que están pasando, yo lo he pasado antes que ellos y les puedo ayudar", sentenció el ex defensa central de FC Barcelona, Olympique de Marseille y SSC Napoli.
Dicho mensaje pareció causar efecto en Sarajevo cuando Francia derrotó a su rival en el Grupo D, Bosnia y Herzegovina, por 0-2 en el segundo encuentro de la fase de clasificación de la UEFA EURO 2012. Blanc esboza una sonrisa cuando habla de la actuación de los suyos en aquel partido, "Necesitábamos una reacción importante en Sarajevo tres días después de caer ante Bielorrusia ante el rival más peligroso del grupo. Los futbolistas estaban entre la espada y la pared. Creo que respondieron bien a las críticas y del mejor modo posible".