Wembley vive la alegría de Montenegro

La alegría de Montenegro con el pitido final corresponde a la de un humilde combinado que este martes cosechó un valioso empate sin goles en Wembley. Una situación muy distinta fue la de Inglaterra, que vivió una noche de lo más frustrante.

El equipo de Fabio Capello disfrutó de largas posesiones con el objetivo de mantener su impoluta estadística de victorias en esta fase de clasificación para la UEFA EURO 2012, pero fue incapaz de romper una ordenada defensa montenegrina. El equipo de Zlatko Kranjčar se coloca de esta forma al frente del Grupo G con diez puntos tras cuatro partidos y con la seguridad de que posiblemente ha tenido éxito en el compromiso a domicilio más complicado de esta fase.

"Para el fútbol de Montenegro éste es un gran resultado. Necesitamos la segunda plaza y éste es un gran gran resultado para nosotros. Ahora tenemos que volver a nuestro país y esperar en junio a Bulgaria. Éste será nuestro gran partido. Kranjčar estaba muy contento porque no se esperaba lograr un punto de Wembley, así que volvemos todos muy felices a nuestro país. Vinimos aquí a jugar, pero el resultado llegó gracias a una buena actuación. La clave fue nuestra buena defensa y nuestra organización", comentó el defensa Stefan Savić a UEFA.com.

Inglaterra, por su parte, retomará su campaña ante Gales en marzo y Rio Ferdinand, que recuperó la capitanía este martes después de perderse por lesión la Copa Mundial de la FIFA, está confiado en que todavía están por el buen camino. "Es una pena porque tenemos cinco meses para pensar en este partido. Sin embargo, no perdimos y tampoco encajamos, y eso es algo agradecido. Hemos estado desafortunados y no hemos creado muchas ocasiones, pero su portero hizo grandes paradas", añadió el defensa.

Gareth Barry fue igual de pragmático, aunque aceptó que el planteamiento visitante había frustrado su fútbol. "Hicieron lo que esperábamos. Comenzaron muy atrás y no nos permitieron espacios con el balón. Las ocasiones que teníamos no eran claras así que hay que darles todo el crédito. Si hubiéramos logrado los tres puntos estaríamos muy bien situados, pero lograr siete puntos en tres partidos no es el fin del mundo. Todavía está en nuestras manos. Estamos confiados de que podemos liderar el grupo", sentenció el jugador del Manchester City FC.

Los sentimientos de Barry coincidieron con los de Kevin Davies, que entró al campo a falta de 20 minutos para hacer su debut internacional a los 33 años. "Tengo al esperanza de haber causado una buena sensación. Tenían muchos hombres detrás del balón y fue muy complicado romper esta barrera. Vinieron aquí a por un punto y lo han logrado", añadió.