Un tanto con un valor muy especial

El éxito para el croata Ivica Olić no ha llegado con facilidad. El atacante de 32 años ha trabajado muy duro para volver a la élite, recuperándose de varias lesiones que interrumpieron su carrera.

Dejando a un lado los pequeños problemas, el delantero del FC Bayern München se ha roto la nariz tres veces, ha sufrido dos lesiones de ligamentos en la rodilla, y más recientemente un problema de cadera. Por estas razones, su tanto en el play-off de la UEFA EURO 2012 ante Turquía tiene un valor especial.

"Estaba pensando en la retirada", admitió el jugador de 32 años, que la pasada temporada pasó por una rehabilitación de nueve meses que puso a prueba sus límites físicos y psicológicos. El ex jugador del PFC CSKA Moskva y del Hamburger SV pensó en dejarlo todo, pero se prometió a sí mismo que lucharía para regresar a la primera línea de batalla.

Pero tan pronto volvió a la competición en el inicio de esta campaña volvió a sufrir una nueva lesión, esta vez en su cadera, que le mantuvo de baja dos meses. Para algunos, esto podría haber sido el golpe de gracia, pero Olić, que terminó segundo en la lista de máximos goleadores de la UEFA Champions League 2009/10 junto a Cristiano Ronaldo y por detrás de Lionel Messi.

A Olić le reconforta el hecho de que cada vez que ha salido de una adversidad, lo ha hecho en un mejor estado de forma. El viernes, 13 meses después de jugar su último compromiso como internacional con Croacia, necesitó sólo dos minutos para marcar ante Turquía en Estambul. Ese gol inicial ayudó a su equipo a dar un paso importante en los play-offs ya que afronta la vuelta con un 3-0 a favor.

"No sabéis lo que ha significado para mí. Llevaba un año fuera y entonces he vuelto y he marcado a los dos minutos. Estoy realmente contento. Luchamos mucho en Estambul y no dejamos que Turquía creara ocasiones en nuestra área. Así es como Croacia juega. Pese a ello todavía no hemos logrado nuestro objetivo, aún queda un partido. Tenemos que ser cautelosos", añadió el jugador del Bayern.

Con titulares en los periódicos nacionales como "Aerolíneas Olić" y "Última llamada para Varsovia y Kiev", Olić ha luchado duro para volver a convertirse en héroe nacional: "Mi mujer y mis hijos se quedaron en Múnich y vieron el encuentro por televisión. Antes de jugar los llamé y mi hijo pequeño, Luka de siete años, me dijo: 'No te preocupes papá, vas a marcar y vamos a ganar'".

"Llamé a mi mujer después del encuentro y me dijo que los niños celebraron efusivamente mi gol. Tuvo muchos problemas para calmarlos. Luka había estado jugando ante Turquía con la PlayStation los últimos tres años, desde la dura derrota en Viena en la UEFA EURO 2008. Ahora ya está tranquilo, su padre ha logrado que Croacia ganara", concluyó Olić.