Los maestros de las bufandas
jueves, 14 de junio de 2012
Resumen del artículo
Los aficionados están siendo alentados a llevar más alegría a las calles de la capital con este original proyecto de los estudiantes de la Academia de Artes de Varsovia.
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Cuerpo del artículo
Se está animado a los aficionados y la población local a que añadan más color a las calles de Varsovia diseñando sus propias bufandas como parte de una iniciativa de los estudiantes de la Academia de Bellas Artes de la capital polaca.
Los estudiantes están diseñando sus propias bufandas con los países de todo el mundo, y animan a los aficionados a que se unan a través de un seminario. "Todo el mundo puede expresar los valores que definen sus vidas, su lema personas, y simplemente algo que puedan admirar otros aficionados", comentó Bruno Althamer, que ayudó al diseño del programa. "La tecnología que hemos desarrollado es muy simple. Gracias a todo el mundo, incluso a los que no tienen habilidades artísticas, podemos crear una bufanda. Se trata principalmente de cortar y coser, habilidades que la mayoría aprendemos en la escuela primaria".
El proyecto 'Algo más que una bufanda' está apoyado por el Museo de Arte Moderno de Varsovia. "La idea surgió hace un año. Primero hicimos nuestras propias bufandas y luego dijimos y pensamos, ¿por qué no dar la oportunidad a la gente de hacer algo similar? Queremos animar a los aficionados a que se expresen ellos mismos y tener un mayor control a las cosas que dicen", explicó Althamer.
"Algunas personas han utilizado las plantillas que nosotros les hemos dado, pero también hay muchos dibujos basados en las ideas de ellos mismos. Tenemos un buen ejemplo de que la imaginación de la mente no tiene límites. Hay muchos símbolos y caras felices específicos de grupos profesionales, símbolos que expresan intereses personales, corazones, nombres e iniciales de las parejas" declaró Diana Grabowska, que también trabaja en el proyecto.
Un lugar temporalmente ubicado en Pańska 3, cerca de la fan zone de Varsovia, incluso es visitado por aficionados cuyas selecciones no están en el torneo, atrapados por la oportunidad de diseñar sus propios recuerdos. "Tras consultar, la budanda se hace en una hora o dos, dependiendo de lo complicado que sea. Incluso hay pedidos tan complicados que necesitamos dos semanas para hacerlo, pero vale la pena. El fútbol le da vida al mundo", concluyó Grabowska.