M'Vila no tiene miedo

Yann M'Vila no es alguien que demuestre fácilmente sus emociones, pero cuando el centrocampista galo se lesionó el tobillo en el partido amistoso disputado el mes pasado ante Serbia, el duro jugador rompió a llorar como un niño.

"En el momento pensé que me quedaba sin UEFA EURO 2012. Empecé a pensar en mi futuro. Era algo serio para que tuviera que abandonar el terreno de juego. La última vez que me hice algo así estuve de baja seis semanas. Todo eso me vino a la cabeza y de repente me vine abajo, dijo el jugador del Stade Rennais FC a UEFA.com.

La lesion a la que se refería M’Vila se la hizo de niño. Desde que debutara en la Ligue 1 en agosto de 2009, el centrocampista no se ha perdido ni un solo partido con el Rennes por lesión. Y es que el jugador, de 21 años, ya ha disputado 110 partidos en la máxima categoría del fútbol galo.

Y es que M’Vila forjó esa resistencia con su padre, ex internacional con el Congo. "Mi padre ha sido muy importante. Me metió en el fútbol cuando yo tenía tres años. Me llevaba a correr también. No salíamos a correr solo 20 minutos, sino que estábamos una hora cada vez. Es por eso que pudo correr sin parar en el campo", dijo M’Vila.

Y es que hasta el seleccionador galo Laurent Blanc le ha tenido que calmar estos días, para que el que fuera campeón regional de campo a través se pudiera recuperar del todo de su lesión. "Soy feliz cuando corro. En vacaciones me voy a correr con los cascos puestos, y hasta se me olvida que estoy corriendo", dijo el natal de Amiens.

Tras haber visto desde el banquillo el primer partido en el Grupo D ante Inglaterra, M’Vila regresó el viernes, y disputó su partido número 20 con la selección cuando sustituyó a Yohan Cabaye en el minuto 23 de su triunfo por 2-0 sobre Ucrania. "Este fue el major momento de mi Carrera. Jugar un partido tan importante, ante la selección co-anfitriona del torneo, es algo que recordaré siempre", dijo M’Vila entusiasmado.

Pero M’Vila nunca pareció nervioso. El centrocampista se hizo con el eje del juego de su equipo, y ayudó a les bleus a cerrar su victoria con varios pases precisos y robos de balón vitales a la hora de defender, algo a lo que los aficionados franceses se han acostumbrado desde que Blanc dio su primera oportunidad al jugador hace dos años. M’Vila tiene una explicación simple a su buen rendimiento con la selección, y dijo: "Solo juego de la misma forma en la que lo hago siempre. Tengo suerte porque nunca me pongo nervioso. Cuando era pequeño siempre jugaba con chicos mayores, así que no tengo problemas con enfrentarme a jugadores de primer nivel. Me olvido de la presión y simplemente juego".

Su estilo de juego físico y efectivo le ha llevado a ser comparado con sus compatriotas Patrick Vieira y Claude Makelele, algo que le levanta una sonrisa. "Ambos son modelos para mí. Cuando era pequeño solía verles mucho, eran la major pareja de mediocentros. Ahora miro a jugadores excelentes como Xabi Alonso, que es un ejemplo para todos los mediocentros defensivos", dijo.

Al igual que le ocurre al jugador del Real Madrid CF, M’Vila no solo se dedica a destruir el juego del rival. "Mi papel es recuperar tantos balones como pueda, pero también llevar al equipo hacia adelante con Buenos pases. Intento juego hacer lo que mi entrenador en el Rennes, Frédéric Antonetti llama un 'pase Champions League'. Son pases que llevan el balón rápidamente hacia posiciones ofensivas", añadió. Si M’Vila continúa dando ese tipo de pases y creando peligro, Blanc va a tener un serio quebradero de cabeza para formar su alineación para el partido ante Suecia.