Roberto Mancini, seleccionador de Italia, sobre su mezcla azzurra

Roberto Mancini asumió mandó de Italia en mayo de 2018 con la azzurra en horas bajas. Por primera vez en 60 años, se quedaba fuera de una Copa Mundial de la FIFA, y tras ganar un primer amistoso contra Arabia Saudí, Mancini vivió una racha de cinco partidos sin ganar, incluyendo dos derrotas. Desde entonces, Italia no ha perdido en 27 partidos, y si supera invicta sus partidos de la fase de grupos de la UEFA EURO 2020 en Roma contra Turquía, Suiza y Gales, Mancini igualará la racha récord de 30 partidos que estableció el equipo de Vittorio Pozzo en la década de 1930.

La secuencia actual incluye la victoria en los diez partidos de la fase de clasificación, llegando además Italia a esta fase final con ocho victorias consecutivas. Mancini ha apostado por una mezcla de jóvenes talentos como Federico Chiesa con futbolistas experimentados como Giorgio Chiellini. El seleccionador habló con UEFA.com sobre esta mezcla en la selección italiana, sobre sus rivales de grupo y sobre las ganas de jugar con público en las grandes en el pistoletazo de salida del torneo contra Turquía el viernes.

Sobre el equipo…

Me gusta el ambiente que se ha creado en el equipo y lo que los jugadores más jóvenes han conseguido en tan poco tiempo gracias, en parte, a la ayuda que han recibido de los jugadores más experimentados del grupo. A veces los jugadores necesitan más tiempo, pero estos jóvenes aprenden rápido y han mejorado mucho, y como son tan jóvenes, todavía pueden mejorar más.

Sobre el grupo de Italia ...

Este grupo es bastante duro. Es poco probable encontrar selecciones débiles en una competición como ésta. Todos son partidos difíciles. Después del sorteo parecía un grupo fácil, pero el fútbol no es así hoy en día. Todos los equipos están bien preparados táctica, técnica y físicamente. Será un grupo complicado.

Turquía es una selección fuerte, porque sus jugadores son buenos técnicamente y físicamente fuertes. Han mejorado mucho. Lo mismo ocurrirá contra Suiza y Gales.

Sobre el rival más duro al que se podría llegar a enfrentar Italia...

Como ya he dicho, en este torneo hay muchas selecciones buenas, pero si tuviera que mencionar solo una, probablemente sería Francia porque es la campeona del mundo. Tenían un equipo muy joven cuando ganaron el Mundial (en 2018), y ahora son incluso mejores. Probablemente sólo podamos enfrentarnos a ellos en la final, así que esperamos que sea Francia.

Sobre el regreso de los aficionados…

La afición es muy importante. Si el Stadio Olimpico tuviera 70.000 personas habría sido genial. Yo jugué el Mundial de 1990 y la afición era increíble. Hoy es un poco diferente: habrá menos gente, pero volver a jugar con ellos en la grada es fantástico.