Steffen Freund: "Alemania será la sorpresa"

Algunos se reirán de esto, pero si tuviera que elegir una sorpresa para la EURO 2020, el primer equipo que se me pasaría por la cabeza sería Alemania.

Ahora algunos pueden decir que están entre los favoritos para el título, pero no es así si se mira el ranking mundial y todos sus altibajos, como la derrota ante Macedonia del Norte. El ambiente no está exento de riesgos para Alemania. Se podría ver de forma negativa, pero también hay connotaciones positivas, ya que el equipo no está expuesto a tanta presión.

Me ha impresionado especialmente Joshua Kimmich. Ya es de clase mundial, pero tiene potencial para convertirse en uno de los tres mejores jugadores del momento, porque ofrece el pack completo. Nunca se ve cansancio ni signos de estrés en él, a pesar de que juega todos los partidos. Es capaz de pasar un balón a la espalda de la defensa rival como ningún otro, tiene cualidades defensivas, determinación y ambición.

Joshua Kimmich es uno de los pilares de AlemaniaGetty Images

En cuanto a los favoritos para la EURO 2020, yo los pondría en el siguiente orden: Francia, Inglaterra, Bélgica, Italia, España y Portugal. Para mí, Francia es la favorita para ganar, ya que tiene la mejor plantilla con diferencia y las cualidades individuales que pueden ser decisivas. Todos los jugadores más importantes de su plantilla tienen un sustituto, ¡es increíble! Todos los futbolistas pueden ser sustituidos y eso es algo muy importante después de una temporada tan larga. Este equipo es tan bueno que incluso podría permitirse perder a su mejor jugador, Kylian Mbappé.

Mbappé será el que más goles marque con Francia, pero mi predicción para la Bota de Oro es Harry Kane: ni siquiera necesita una ocasión de gol para meter el balón en la red. Trabajó increíblemente duro para conseguir esta cualidad en sus años de juventud y, una vez que se encuentra en posición de disparar, resulta muy difícil para el defensor impedir que marque. Por cierto, creo que Inglaterra es capaz de llegar muy lejos.

Volviendo a Alemania, creo que el primer partido contra Francia pone el listón muy alto, y por eso es el que más espero. ¿Podemos seguir el ritmo de Francia o incluso sorprenderla? Si conseguimos un punto, o incluso si ganamos el partido, esto crearía rápidamente un ambiente positivo para Alemania. Pero también es posible sufrir una dura derrota contra este equipo francés. ¡Creo que el partido va a ser espectacular!

Como jugador, en el partido inaugural de un gran torneo vives una emoción y una tensión que no son comparables a las de ningún otro partido de la Bundesliga o de la UEFA Champions League. Es porque estás representando a tu país y todos los ojos en casa están puestos en ti. Estás orgulloso de representar a tu país y te gustaría hacerlo bien para los 80 millones de personas de Alemania. El día del partido, lo sientes hasta un nivel extremo y se queda contigo durante el resto del torneo.

Mi mejor recuerdo como jugador de la EURO es la semifinal de 1996 contra Inglaterra, ante 80.000 espectadores en Wembley. Recomiendo a todo el mundo que vea la repetición de este partido: se le pondrá la piel de gallina a los 15 minutos como máximo. El ambiente era increíblemente conmovedor, porque la gente allí celebra el fútbol de una manera extraordinaria. Cuando 80.000 personas empiezan a cantar y no paran hasta que termina el partido, es difícil de entender.

El partido se desarrolló de forma muy emotiva y emocionante, pero, a pesar de que Inglaterra perdió, la despedida que recibimos fue con mucho respeto. Nunca lo olvidaré. Al mismo tiempo, este partido fue una experiencia muy negativa para mí, porque me rompí el ligamento cruzado anterior en el último minuto. Me emocioné mucho después y quise volver a casa inmediatamente. Me afectó mucho no poder jugar la final.

En cuanto al ambiente de los estadios en esta EURO, me alegro de que vayamos en la buena dirección. Los aficionados son muy importantes en los partidos de fútbol. La belleza del partido sólo está presente cuando hay aficionados. Se necesitan emociones y tiene que surgir una simbiosis. En Alemania tenemos un dicho para esto: "Esto es la sal en la sopa". Y la sopa no sabe bien cuando faltan los aficionados.