La importancia del número '1'
lunes, 14 de marzo de 2005
Resumen del artículo
El éxito de Petr Cech en el Chelsea ha mejorado la reputación de los guardametas checos.
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Por Ladislav Josef
Tras brillar en la Premiership con el Chelsea FC y realizar una actuación sobresaliente en la UEFA EURO 2004™, Petr Cech es el mejor portero de la República Checa.
Primer número uno
Mientras que en muchos otros países los niños sueñan con ser grandes goleadores, en la República Checa ser el número '1' en el campo es lo mismo que ser el número 1 en el corazón de los jóvenes seguidores y de los periodistas. De hecho, los periodistas votaron a Cech como el mejor jugador nacional de 2004, por delante del Balón de Oro Pavel Nedved y del máximo goleador de la EURO 2004™, Milan Baroš.
Ilustre Plánicka
Los porteros han tenido siempre una plaza especial en el país desde František Plánicka, que rivalizó con el español Ricardo Zamora por el título oficioso de mejor portero europeo. Plánicka fue capitán de la selección checoslovaca que conquistó la medalla de plata en la Copa Mundial de la FIFA de 1934, y fue la figura más popular en su país, incluso más que el máximo goleador del torneo, Oldrich Nejedly. Su popularidad aumentó en la fase final de 1938, cuando disputó un partido contra Brasil a pesar de tener el brazo roto.
Papel de Viktor
En los años setenta, el liderazgo de Plánicka recayó en Ivo Víctor, que ganó el premio de Jugador del Año en Checoslovaquia cinco veces, un récord que sigue imbatido en la actualidad. Las paradas de Víctor permitieron que Checoslovaquia ganase la Eurocopa UEFA 1976 y seguramente se habría convertido en un jugador más importante en el fútbol europeo si hubiese podido salir de Europa del este.
Entrenador de porteros
Sin embargo, al quedarse en su país, Víctor pudo ayudar a los porteros que le siguieron. También se creó una competición, “El Balón de Víctor”, de gran valor para los siguientes números '1'. Además, Víctor fue el ayudante de Dušan Uhrin cuando la República Checa acabó segunda en la UEFA EURO '96™.
'Revolución de terciopelo'
En esa época, la 'revolución de terciopelo' de 1989 había abierto las puertas al oeste y los porteros checos lo han aprovechado. El gigantesco Ludek Miklosko se fue para el West Ham United FC en Inglaterra donde sigue como entrenador de porteros. Por su parte, su compatriota Jan Stejskal se fue a otro equipo de Londres, el Queens Park Rangers FC, y actualmente es entrenador de porteros en el Sparta Praha.
Fichajes ingleses
Esos dos porteros abrieron el apetito de los clubes ingleses por el guardameta checo, y después del éxito de Cech en el Chelsea, Radek Cerny, del SK Slavia Praha, fichó por el Tottenham Hotspur FC en enero, mientras que Jaroslav Drobný será pronto presentado con el Fulham FC procedente del Panionios NFC griego.
Presencia en Europa
Sin embargo, los porteros checos están dejando su huella en toda Europa. Pavel Srnícek, que pasó sus mejores años en el Newcastle United FC, está ahora con el SC Beira-Mar de Portugal; Ladislav Maier es una estrella en el SK Rapid Wien austriaco; Antonín Kinský está teniendo un gran papel en el FC Saturn Ramenskoye ruso; Jan Lastuvka está con el FC Shakhtar Donetsk de Ucrania y Daniel Zítka prospera en Bélgica con el RSC Anderlecht.
Primera opción
Quizá exista algo en el estilo checo que ayude a formar buenos porteros. Curiosamente el mejor goleador internacional en la historia de la República Checa con 35 tantos, Jan Koller, debutó como portero. Sólo se ha vuelto a poner los guantes después de que el guardameta del BV Borussia Dortmund fuese expulsado en un partido ante el FC Bayern München en 2002.
Cantera
Los jóvenes checos quieren portar el número '1' en la espalda más que cualquier otro. Quizá es por eso que la producción de guardametas siga siendo tan abundante en Praga.